miércoles, 20 de febrero de 2019

El camino de la des-integridad


El camino de la des-integridad

La DES-INTEGRIDAD es todo aquello que genera una energía y vibración nociva, turbia, forzada, desarmonizada, tóxica y deshonra la vida

¿De qué formas decido desde la Des-integridad?

-          Quedándome únicamente con la lectura del mundo físico.
o   Es responsabilidad del ser humano mirar el mundo metafísico en el entendido que el mundo físico es sólo un síntoma y espejo de nuestras decisiones.
-          Parándome en la creencia de la escasez y limitación del Universo.
-          Victimizándome de acciones de otras personas y de circunstancias externas provocadas por lo que creo es la acción del “azar”.
-          Quedándome en los conceptos vulgares de "casualidad", "accidentes", "enfermedades", "robos"...sin ver en los eventos una señal para profundizar e ir a fondo con el origen de los mismos, y generar una transformación en mí ser. 
-          Deteniéndome en El MIEDO.
o   El miedo a no poder, a recibir eventos que te resten, desacomoden o desestabilicen a jugar en la zona de “Confort” (igual a Comodidad) y te sacrificas durante la gran parte de tu existencia.
-          Quedándome en un estado “depresivo”.
o   No generas impacto y vas perdiendo aplomo en tu cuerpo como si tuviera una ¨mochila¨ que le pesara.
o   Un espejo de mediocridad, de lo no POSIBLE, del vivir a corto plazo y desconocer y desconectar con las consecuencias a largo plazo y en otras de no vivir ni a largo, ni a corto plazo.
-          En la cotidianeidad de mis acciones estoy demasiado atento y pongo el foco en cuidar mi arco.
-          Soy extremadamente racional y razonable.
-          Estoy más pendiente de lo que no quiero, que de lo que quiero.
o   La tendencia es poner el foco en lo que puedo perder y no en lo que puedo ganar.
-          Conformista, complaciente, tenso, paranoico, fatalista, sin convicciones firmes ni enfocadas afuera. 
-          Exhibicionista, cómodo, inseguro, ¨necesito¨ y vivo de la aprobación de los demás.
-          Mi tendencia es a sacarme los compromisos de encima, haciendo lo mínimo e indispensable; otras tendencias marcadas es adaptarse a la corriente y a ¨venderse¨…
-          Estoy parado en TENER y el SER tiende a estar enmascarado y reprimido.
-          Creyéndome efecto y no causa.
-          Frivolizando la vida.
-          Enjuiciando y enjuiciándome.
-          Criticando y criticándome. 
-          Manipulando y manipulándome.
-          Imponiendo e imponiéndome.
-          Especulando.
-          Maltratando y maltratándome.
-          Culpando y culpándome.
-          Subestimando y subestimándome.
-          Condicionando y condicionándome.
-          Insultando e insultándome.
-          Violentando y violentándome.
-          Racionalizando y racionalizándome.
-          Desconfiando de mí y del otro.
-          Rompiendo la palabra. 
-          Suponiendo.
-          Tomándome las cosas personalmente. 
-          Dejándome herir e incomodar por el otro.
-          Callándome por miedo o timidez escesiva.
-          Aburriéndome.
o   La monotonía y el aburri-miento nacen de saber que no he alcanzado o he abandonado para mí la total expansión espiritual.
-          Enojándome. 
-          Quejándome. 
-          Justificando y justificándome.
-          Conformándome. 
-          Sufriendo (sufrir es una decisión). 
-          Vengándome. 
-          Mintiendo y mintiéndome.
-          Engañando y engañándome.
-          Matando y matándome.
-          Robando y robándome.
-          Estafando y estafándome.
-          Aflojándome.
-          Apagándome.
-          Congelándome.
-          Robotizándome.
-          Cruzándome de brazos. 
-          Reaccionando reactivamente ante los eventos externos. 
-          Actuando desde mi instinto e impulsos primarios.
-          Buscando la satisfacción y el placer temporal y la supuesta “felicidad" momentánea. 
-          Siendo avaro. 
-          Preocupándome por los efectos, síntomas y reacciones. 
-          Queriendo tener la razón. 
-          Encaprichándome.
-          Luciéndome. 
-          Evitando el dolor. 
-          Teniendo lástima y teniéndome lástima.
-          Complaciendo y complaciéndome.
-          Chismorreando (hablar de un tercero en ausencia de él). 
-          Juzgando y juzgándome.
-          Corrompiendo y corrompiéndome.
-          Compitiendo.
-          Subestimando y subestimándome.
-          Degradando y degradándome.
-          Trabajando en algo que no me gusta y que no está conectado con mi misión y con mi talento.
-          Comerciando productos nocivos para la salud de los seres humanos.
-          Vendiendo y consumiendo productos nocivos para la madre tierra. 
-          Alimentando y alimentándome con cadáver.
-          Protegiendo y protegiéndome con prendas de origen animal.
-          Recibiendo únicamente para mí mismo/a. 
-          Controlando y controlándome.
-          Pelándome.
-          Discutiendo.
-          Gritando.
-          Compartiendo una relación solamente por conveniencia, comodidad o por no querer estar solo. 
-          Estar con otra persona que no sea tu pareja si el acuerdo establecido establece que eso no es una opción.
-          Omitir lo que realmente piensas y sientes por una persona a la que dices amar.
-          Quedándome en estados emocionales limitantes: celos, odio, ira, miedo, pesimismo, melancolía, depresión, ansiedad, angustia, desesperanza, resentimiento, rencor, irritabilidad, desprecio, iracundia, hipocresía, impotencia, remordimiento, desinterés, apatía, lástima, desconexión, violencia, rigidez…
-          Quedándome en mi zona de “confort”.
-          Siendo "correcto" cumpliendo "únicamente" con los mandatos familiares y sociales tradicionales (casarme, estudiar, comprar una casa, adquirir un auto, viajar, etc.).
-          Yendo por caminos "fáciles" y conocidos. 
-          Haciendo cosas desde el "tengo que" o “debo que”, por obligación.
-          Observando la vida pasar ante mis ojos. 
-          Desconectándome de tus hijos y no hacerme responsable por ellos hasta su mayoría de edad.  
-          Prostituyéndote (sexualmente, materialmente, laboralmente, y de todas formas en que te estás vendiendo por dinero o por algún tipo de intercambio).
-          Comiendo del “Pan de la Vergüenza”, definido por las emociones que nos restan cuando obtenemos lo que tenemos sin haber hecho el esfuerzo (a nivel económico, afectivo, etc.).
-          Haciendo uso y abuso de palabras escasas.
-          Enjuiciando (enjuiciándome). 
-          Criticando (criticándome). 
-          Manipulando (manipulándome). 
-          Imponiendo (imponiéndome).
-          Especulando (especulándome). 
-          Maltratando (maltratándome).
-          Culpando (culpándome).
-          Subestimando (subestimándome).
-          Condicionando (condicionándome).
-          Insultando (insultándome).
-          Violentando. (violentándome).
-          Racionalizando (racionalizándome). 
-          Desconfiando (desconfiando de mí).
-          Rompiendo la palabra (rompiendo mi palabra). 
-          Suponiendo (generándome suposiciones). 
-          Tomándome las cosas personalmente. 
-          Dejándome herir e incomodar por el otro.
-          Callando (callándome).
-          Aburriéndome
o   la monotonía y el aburri-miento nacen de saber que no he alcanzado o he abandonado para mí la total expansión espiritual.
-          Enojándome. 
-          Quejándome. 
-          Justificando (justificándome).
-          Conformándome. 
-          Sufriendo. 
-          Vengándome. 
-          Mintiendo (mintiéndome).
-          Engañando (engañándome). 
-          Matando (matándome).
-          Robando (robándome). 
-          Estafando (estafándome).
-          Aflojando (aflojándome).
-          Apagando (apagándome).  
-          Congelando (congelándome).
-          Robotizando (robotizándome).
-          Cruzándome de brazos. 
-          Reaccionando reactivamente ante los eventos externos. 
-          Actuando desde mi instinto e impulsos primarios.
-          Buscando la satisfacción y el placer temporal y la supuesta "felicidad" momentánea. 
-          Siendo avaro. 
-          Preocupándome por los efectos, síntomas y reacciones. 
-          Queriendo tener la razón. 
-          Encaprichándome.
-          Luciéndome. 
-          Deteniéndome por miedo. 
-          Evitando el dolor. 
-          Teniendo lástima (teniéndome lástima).
-          Complaciendo (complaciéndome).
-          Moviéndome por el ego o por el dinero o por el placer. 
-          Haciendo dinero a costa de cualquier precio, abusando y explotando a los seres humanos y a la naturaleza.
-          Parándome desde el ganar-perder.
-          ¿Qué más….?


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