viernes, 17 de enero de 2020

Deja esa extraña costumbre de boicotearte


“No me saludó porque está enojado conmigo... "No vino porque no se acuerda de mí..." "Dudó en contestarme porque me miente... "No me preguntó porque no le importo...""Nunca me dice que me quiere porque no lo siente."...
Afirmamos algo que sólo suponemos. Es lo que se denomina inferencia arbitraria, una distorsión cognitiva.
Muchas veces decretas lo que el otro piensa o siente. ¿Cómo podrías saberlo? No estás adentro del otro. No eres igual que el otro. No hay manera de leer su mente.
Sólo puedes suponer. Sin embargo, le das a tu pensamiento la categoría de certeza, y en base a eso, actúas (te quejas, peleas, reprochas, te angustias). Si tu "verdad" supuesta es errada, el otro no entiende lo que estás haciendo. Y, tal vez, te pregunte, o tal vez, al igual que tú, suponga. Y responderá en consecuencia. El conflicto está instalado.
Las suposiciones no son inocuas. Tarde o temprano nos "pasan factura". Siempre que pensemos mal, nuestras emociones se verán afectadas y se reflejará en nuestra conducta.
"¿Y entonces, qué hago?" Es simple. Piensa para ti, no por el otro. Una conducta sana se basa en lo que sé de mí, y no en lo que creo saber del otro.
NO SUPONGAS. Para entender lo que el otro piensa o siente, hay que preguntarle. "¿Y si me miente?" "¿Y si no me responde?"
Entonces tendrás que aceptar que hay cosas que tal vez sepas algún día y otras, que no vas a saber nunca. No es tan terrible. Ignorar ciertas cosas nunca mató a nadie.
Algunas preguntas tienen respuestas más simples de las que suponemos. Y otras, simplemente, no tienen respuesta. No hay que preocuparse por eso. Tener todas las respuestas no es requisito indispensable para ser feliz.




Atraemos a las personas correctas de acuerdo a nuestro estado de amor o de carencia

Si queremos relaciones sanas, que nos nutran de afecto y que podamos mantener en el tiempo para nuestro mayor bien, será necesario hacernos conscientes de que atraemos a nuestras vidas lo que se encuentra en sintonía con nuestra vibración.
A veces nos preguntamos por qué se acercan a nosotros personas con determinadas características, como si de un patrón se tratase, sin llegar a profundizar en la respuesta a esa interrogante. Justo allí estarían las claves para iniciar un trabajo de re-valorización interno que nos coloque de frente con lo que llevamos dentro y nos permita ver si estamos atrayendo desde nuestro estado de amor o desde nuestro estado de carencia.
Desde el amor
Cuando atraemos desde el amor, recibimos justo eso. Incluso cuando las relaciones no se convierten en lo que nos gustaría, nos dejan el buen sabor en la boca de que estuvimos con una persona que llenó nuestra vida de amor, de color, de atención y de momentos y detalles especiales.
Desde la carencia
Mientras que cuando atraemos desde la carencia, sentimos que son los demás los que deben llenar nuestros vacíos emocionales. Quedándonos con la sensación de que las personas que se acercan a nuestras vidas nunca nos dan lo suficiente. Que somos nosotros lo que aportamos más, que el resultado son relaciones que nos restan, que nos llevan a menos.
Y es que desde la carencia, pretendemos que alguien venga a llenar lo que solo nos corresponde a nosotros darnos. Somos seres completos. No necesitamos complementarnos, ni unirnos a alguien para realmente ser en nuestra máxima expresión.
Así que cuando buscamos relacionarnos con alguien para satisfacer nuestras necesidades y llenar los vacíos que sentimos, estamos arrancando con mal pie. Porque quien se sienta pleno, capaz de compartir su propia felicidad con otro, no se va a sentir atraído por esa persona que busca a alguien para rellenar lo que siente en blanco.
La felicidad se comparte
Normalmente las parejas felices, las conforman dos personas que pueden y saben ser felices de manera individual. De lo contrario, la felicidad dependería del otro y cualquier foco de felicidad externo, es simplemente un disfrute momentáneo, una felicidad disfrazada, que cuando se quita la capa está llena de dudas, de dependencias, de necesidades y de apegos, por lo tanto no es real, no es genuina y no es sostenible en el tiempo.
Ninguna persona que se acerca a nosotros es por error. Cada una nos habla de lo que estamos ofreciendo al universo a nivel vibracional y este universo con capacidad de dar y responder generosa y obedientemente, nos está enviando a personas que estén en la misma sintonía.
No nos disgustemos por tener relaciones complicadas, vacías, que no nos ofrecen lo que conscientemente queremos. Agradezcamos por cada oportunidad que se nos presenta de evaluar lo que atraemos y miremos nuestros cambios a través de esos espejos maravillosos que se nos presentan por petición energética en nuestras vidas.
Si queremos cambiar lo que se nos acerca, debemos cambiar nuestra vibración. Para ello será necesario amarnos más, respetarnos, cuidarnos, creer en nosotros mismos y anular toda creencia que nos esté saboteando la posibilidad de que el universo nos sorprenda con alguien con quien podamos entretejer caminos y sentirnos satisfechos con lo que construimos.
Muchas veces una misma relación se presta para cambios de ambas partes, llegando en conjunto a convertirse en una relación que se da desde el estado del amor, en lugar del de la carencia. Pero esto requiere un trabajo individual, que puede verse favorecido por la colaboración y el aporte de cada uno en la vida del otro.
Los miedos más comunes cuando establecemos una relación con alguien son los siguientes:
  • Miedo a que no nos amen.
  • Tememos perder a quien nos interesa.
  • Miedo a mostrarnos como somos.
  • Miedo a fracasar.
  • Tememos que jueguen con nuestros sentimientos.
  • Miedo a que nos engañen.
  • Miedo a no ser suficientes.
  • Tememos que haya otra persona con mejores cualidades que nosotros.
  • Miedo a no poder corresponder a lo que nos ofrecen.
La mente es la fuente de todos nuestros miedos, en especial nuestro ego, que se siente en la necesidad constante de protegernos, pero en medio de ese intento de cuidarnos, nos aleja del amor verdadero. Saber identificar cuando es la mente la que habla y no nuestro corazón, nos coloca en una posición de gran ventaja al momento de decidir a qué debemos darle fuerza y en qué dirección deben ir nuestras apuestas.
Cuando dejamos de sentir esos miedos y damos paso a la confianza, nos podemos dar el lujo de ser quienes somos en realidad y esperar que solo por eso ya nos ofrezcan el amor del que nos gustaría disfrutar. Por ello debemos sentirnos merecedores de amor y con capacidad de ofrecer justo eso a quien nos interese para compartir al menos un trayecto de nuestras vidas.
Más corazón, menos mente… Más amor, menos carencia…

Sara Espejo

La falsa identidad

LA FALSA IDENTIDAD | ¿Quien eres? 
La verdad es que no conoces a nadie y nadie te conoce a ti. Cuando la gente habla contigo, lo que en realidad está haciendo es hablar con el personaje que ha creado de ti. Cualquier cosa que la gente diga sobre ti no es más que proyección de la imagen que captan de ti, de sus ideas, represiones, expectativas, programas y creencias, de lo que creen que eres, pero eso que creen de ti solo existe en su realidad, es único para cada uno de ellos, es una ilusión. No tiene nada ver contigo.
Eres una persona distinta para cada persona que te conoce.

Mucha gente no lo sabe pero esta es una de Las principales causas de Depresión en Ingles se interpreta Como DEEP REST (descanso profundo)
Podemos optar por ver la depresión no como una enfermedad mental, sino en un nivel mucho más sensato como un estado -bastante mal interpretado- de DESCANSO PROFUNDO en el que entramos cuando nos sentimos completamente exhaustos por cargar el peso del falso yo, del relato que la mente inventa acerca de lo que somos.
La de-presión es una inconsciente pérdida de interés en todo lo que es de segunda mano, es el anhelo de ‘morir’ a todo lo falso y liberarnos del agotador drama de la personalidad.
El llamado de la depresión a una transformación espiritual tiene que ser escuchado y entendido, no medicado, analizado o meditado con el fin de hacerlo desaparecer.
La única forma de recrearse es desarmando las bases de lo ya creado, dejar de creer y validar en una identidad, personaje, diseño, personalidad que consiste en cambiar lo que crees sobre ti mismo. Si te desapegas de las mentiras, ideas, creencias, programas que crees sobre ti, las mentiras que crees sobre las demás personas cambiarán. Cada vez que cambias al personaje principal de tu historia, a ese diseño, toda la historia cambia para adaptarse al nuevo personaje.
Entonces te das cuenta que tu tampoco eres siempre el mismo, por que definirse simplemente es limitarse. Eres, solo permítete ser como sucedes. No de lo que eras en el pasado, ni de lo que serás en el futuro, simplemente la plena conciencia aquí y ahora. Sin conceptos, sin creencias, sin programas, sin pasado y sin futuro. Sé Sólo en plena presencia.

Aceptar lo que más rechazo de mí, me fortalece

ACEPTAR LO QUE MÁS RECHAZO DE MI
Aquello que rechazo ahora sé que me hace fuerte, mi sombra es mi tesoro, ahora he entrado en ella, la conozco, sé quien soy.
Como mujer me acepto, me perdono, soy compasiva conmigo.
Sé que soy completa, no soy media naranja.

No necesito competir, tengo mis propias herramientas, tengo mi intuición, tengo el amor del Universo en mi y puedo poseer y sentir la vida dentro de mi.
Sé que la rama del árbol me ha sostenido, pero un día el árbol me contó que puedo volar yo sola, no necesito apoyarme en él, aunque a él nunca le importó, me sostuvo.
El poder como un viento fresco, un aire poderoso que alumbra la llanura está en mi, lo siento, sé que esa fuerza fue trasmitida por mis madres, mis padres, mis ancestros amados, esa fuerza la poseo, es mía como Hija de Dios, Hija de la Tierra, del Viento y del Fuego que están en mi, corren por mi ríos de poder y amor por mis venas, por mis entrañas.
Siento esa fuerza y ese poder que la sociedad me ha tratado de arrebatar, de quitar, de menospreciar desde tiempos remotos, ancestrales.

No soy la criada, la cenicienta, soy la Emperatriz en el Tarot de la Vida, la Reina en el ajedrez que defiende al Rey, educo a la futura humanidad, soy el principio y el fin, el Alfa y el Omega todo nace de mi, la vida emerge con su fuerza a través de mi.
Sé quien soy.
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jueves, 16 de enero de 2020

La queja atrae pobreza, la gratitud abundancia

La gratitud es riqueza y la queja es pobreza; es la regla de oro de la vida, en tu salud, tu trabajo, tus relaciones y tu dinero. Mientras más agradecido puedes estar por el dinero que tienes, aunque no tengas mucho, mas riqueza recibirás. Y mientras más te quejes acerca del dinero, más pobre te volverás.
Quizás estás pensando: “Es fácil de decirlo, pero es muy difícil cuando tienes deudas y no tienes dinero para pagar las cuentas”, y es correcto, es muy difícil, así que estás creando más pobreza cuando piensas de esa forma y empeoras tu situación.
Todos los que se quejan por la falta de dinero creyendo que el dinero es el culpable de todos los males son los que menos disfrutan de las cosas buenas de la vida y buscan todo tipo de excusas para justificarse.
Si quieres crear abundancia en tu vida, la forma correcta es empezar con tus palabras. Las palabras crean pensamientos, las palabras son decretos. La repetición de las palabras se convierte en creencias, y las creencias crean sentimientos; tú puedes activar esos sentimientos para convertirlos en emociones y tus emociones son tu humor vibracional.
Tú te mereces solo cosas buenas, lo mejor. La abundancia te está esperando, solo necesitas estar en el mismo humor vibracional. He aquí algunos pasos que puedes hacer para estar en el humor correcto y permitir que la abundancia llegue a tu vida:

1. Repite Y Practica Afirmaciones Positivas

“Yo merezco solo cosas buenas. Yo soy abundancia. Cada célula de mi cuerpo, mente y espíritu está llena de abundancia. Yo estoy abierta a recibir dinero en mi vida. El dinero llega a mí de diferentes formas…”

2. Se Agradecido Por Todo Lo Que Tienes

No cometas el error de quejarte por las cosas que no tienes o que has perdido. La gratitud abre las puertas para recibir lo que estás pidiendo y te hace sentir merecedor. Puedes agradecer a aquello en lo que creas: “Gracias Dios por todo lo que tengo y por las cosas maravillosas que están por llegar a mí”.
No te acuestes sin agradecer de cinco a diez cosas que te ocurrieron durante el día. También puedes escribir tus afirmaciones de gratitud en tu diario de agradecimientos.

Hoy Es El Mejor Día Para Decir Gracias

Es fácil estar agradecidos por las cosas buenas. Una vida de ricos logros sólo alcanza a quienes también son agradecidos por los reveses.
La gratitud puede tornar algo negativo en algo positivo. Hallemos la manera de estar agradecidos por nuestras dificultades y se convertirán en nuestras bendiciones.
Seamos agradecidos cuando no sabemos algo porque nos da la oportunidad de aprender.
Seamos agradecidos por nuestras limitaciones ya que nos dan oportunidad de mejorar.
Seamos agradecidos por cada nuevo desafío porque edifica nuestro carácter y nos fortalece.
Seamos agradecidos por nuestros errores ya que nos enseñan valiosas lecciones.
El Universo está lleno de abundancia y está esperando para darte lo que es tuyo. Toma esfuerzo y mucha práctica para cambiar tu pobreza en abundancia, pero vale la pena porque es lo que tú mereces. La abundancia es un estado del ser y tú puedes crearla.
Tener talento abre puertas, ser agradecido, las mantiene abiertas.

Lo semejante atrae lo semejante

Así como vibres tú, así es lo que atraes. Todos estamos conectados, somos una sola energía.
Nuestras relaciones se basan fundamentalmente en cómo es nuestro estado de consciencia. Las personas que nos rodean, ya sean familiares, amigos, compañeros de trabajo, enemigos, etc., todos ellos son un reflejo de nuestro estado de consciencia; así como vibro yo, así atraigo a los demás, aquellos que me van a mostrar mi parte subconsciente.
¿Qué es el subconsciente?
Es la parte de la mente de la cual no somos conscientes.

Solo somos conscientes de una pequeñísima parte, un 5% aproximadamente, todo lo demás se va haciendo consciente a medida que experimentamos y nos relacionamos con los demás.
Nuestras sombras, egos, ya están en nosotros. Aquello que nos molesta de los demás, está pues en nosotros. Y es una oportunidad que la vida nos ofrece de poder darnos cuenta y sanarlo.
Cada vez que culpas a los demás, crees que ellos son los que están equivocados, son los que te han hecho daño, etc. Pero esto es tu forma de ver la vida, desde la mirada del falso "yo" (ego).
Todo sucede por algo y para algo... y es una bendición que los demás estén ahí reflejándonos todas nuestras sombras que permanecen en nuestro subconsciente.
Cada vez que te sientas enojado, dolorido, rencoroso con alguna persona en concreto, no es la persona la que te ha hecho enojar o te ha hecho sentir mal, etc., es algo que ya está en ti, una forma de ver la vida según tu estado de consciencia. Esa persona simplemente está ahí, para reflejarte tus dolores, tus enojos, tus rencores, etc. Esa persona te está ayudando a sacar a la superficie aquellas emociones negativas y dolores que tanto estabas reprimiendo en tu interior.
Agradece, bendice... porque todo es perfecto...
Cuando cambias la perspectiva de ver la vida desde esta comprensión, te das cuenta de que el perdón no existe; ves claramente de que no hay nada que perdonar al otro, ya que él solo está ayudándote a darte cuenta de tu falta de amor hacia ti mismo...

Cuando empiezas a amarte y a respetarte, se acaban la mayoría de los conflictos. Ya que el único conflicto que existe realmente es la falta de amor debido a un gran apego a la creencia del "yo".
El "yo" vive desde la mente, desde la superficie, siempre haciendo lo posible para aparentar ser alguien que no es; vive de apariencias para ser reconocido y querido por los demás.
Cuando vivimos desde las apariencias, estamos viviendo desde la ilusión, falsas creencias sin base real. Y en este estado, uno vive desde la separación, la carencia y el dolor.
Cuando empezamos a vivir desde el corazón, siendo coherentes con lo que sentimos y expresándonos tal y como somos, entonces vivimos desde el amor, la verdad, desde la unidad con el Todo. Y en este estado, hay paz, armonía, felicidad y el mundo te reflejará eso.
Por tanto, cuando algo no te agrade, sea lo que sea (alguna persona, las guerras, el hambre, los homicidios, las competiciones, las enfermedades, etc.), ello está reflejando el subconsciente colectivo. Y si algo de todo lo que ves, te hace sentir mal, significa que hay algo en ti que debes sanar.
Cuando las cosas te afectan, lo hacen, para que sanes. Observa y encuentra por ti mismo, qué significado se oculta tras ellas.
Camino al Despertar

Mito de la Caverna de Platón

Mito de la Caverna de Platón
¿Qué pasaría si nos dijeran que toda nuestra vida ha sido una ilusión? ¿Qué hemos vivido en el engaño y que lo que creemos como real, concreto e incuestionable no es así?.... Platón en su alegoría de la caverna nos llama a la reflexión, nos dice:

Imaginen que hay unos hombres dentro de una caverna atados de cabeza, pies y manos desde el mismísimo día de su nacimiento, obligados a mirar siempre hacia una de las paredes de la misma. Tras ellos hay una gran hoguera que ellos nunca llegan a ver y más allá la salida de la cueva. Continuamente por la entrada de la cueva pasan animales, otras personas y demás cosas que proyectan su sombra distorsionada en la pared y el eco de sus voces es lo único que llega al interior de esta caverna. Esto es lo único que estos hombres pueden ver, lo único que pueden escuchar. Para ellos esa es la realidad ya que no conocen ni conciben otra cosa. Pero un día, ya de adultos, uno de ellos es liberado. Al salir de la cueva la luz lo ciega ya que nunca había visto el sol. Todo lo sorprende y tiene miedo de esto que NO PUEDE ser real porque su realidad son las sombras de la cueva, no puede concebir que las sombras no eran lo real sino solo reflejos distorsionados de las cosas reales. Sin embargo con el tiempo se empieza a dar cuenta de que vivió en la ilusión y que este mundo es infinitamente más maravilloso y verdadero. Entonces decide volver a la cueva para contarles esta verdad a los demás hombres que siguen prisioneros y liberarlos, sin embargo, al oírlo estos no pueden entenderlo, creen que está loco e incluso algunos se vuelven en su contra y hasta intentan herirlo. No quieren ser liberados porque esa realidad ilusoria de sombras en la que viven es SU realidad y por más dura y esclavizante que sea prefieren aferrarse a ella a replantearse el hecho de que toda su vida sea una mentira y sus creencias más profundas sean erróneas. El miedo a NO SER es tan grande en ellos que se aferran a lo que conocen aunque esa existencia conocida sea patética ya que sobre estas bases han construido su yo, su ego.

Somos lo que pensamos

Todos los fenómenos están incluidos en la mente. No hay nada que exista fuera de la mente. La naturaleza de la mente en sí misma es la iluminación.

Rongzompa

La sabiduría budista es un cauce abundante, del cual se desprenden diversas corrientes. El budismo ha evolucionado en diferentes escuelas, algunas de ellas muy diferentes entre sí y con prácticas sumamente complejas y elaboradas. Pero todos los "budismos" comparten una noción básica en la cual puede sintetizarse esta religión, que es a su vez también una ciencia de la mente: somos lo que pensamos o, dicho de otra manera, nuestros procesos cognitivos son el mundo que vivimos y, también: aquello en lo que meditamos, en eso nos convertimos. Lo central en el budismo, a diferencia de la ciencia moderna materialista, es la mente; todo lo demás se deriva de ella. Como ha dicho el maestro budista Alan Wallace, si uno no cree que la mente o la conciencia es fundamental --la raíz de todo lo que experimentamos-- uno no puede ser realmente budista. Puesto que evidentemente uno es entonces materialista y el materialismo cae en uno de los extremos que describió Nagarjuna al considerar que no existimos más allá de un soporte material finito, es decir, una forma de nihilismo.

El que quizás sea el texto budista más famoso de la historia, el Dhammapada, inicia con estos versos:

Lo que somos es resultado de lo que hemos pensado;

es fabricado por nuestros pensamientos, está compuesto de nuestros pensamientos.

Si uno habla con una mente contaminada,

el sufrimiento sigue tan seguro

como la rueda de un carro sigue al buey que la empuja.

Si uno habla o actúa con un pensamiento puro,

la felicidad sigue tan seguro

como una sombra que nunca se aleja.

Una traducción alterna empieza:

Toda experiencia es precedida por la mente, conducida por la mente, fabricada por la mente...

Las enseñanzas del Buda histórico, aunque vastas y diversas, generalmente se suelen resumir en las cuatro nobles verdades. A grandes rasgos: el mundo (samsara) es sufrimiento; el deseo (tanha) es la raíz del sufrimiento; el sufrimiento puede cesar a través del desapego y el correcto entendimiento de la realidad (nirvana); existe un sendero o un procedimiento correcto para lograr esto, el cual se conoce como el óctuple noble sendero y que tiene tres pilares: shila (disciplina o ética), samadhi (concentración o pacificación de la mente) y prajna (sabiduría o discernimiento). Ahora bien, este esquema en realidad también tiene como fundamento el principio de que la mente es la raíz del mundo que experimentamos: la mente es el origen del samsara/nirvana.

Particularmente los vehículos del mahayana y del mantrayana harán énfasis en que la raíz de todo este mundo (cuya característica esencial es el sufrimiento), o la causa que subyace a la causa del deseo (el deseo, que es lo que encadena a la conciencia al mundo a través de las inscripciones o improntas del karma), es la ignorancia (avidya, en sánscrito), una mente contaminada o una mente que no funciona de manera óptima. Este no funcionar de manera óptima es esencialmente percibir las cosas de manera dual o separada, como un sujeto separado e independiente de un mundo de objetos; para el theravada el énfasis en el error de la mente estará situado en no entender que las cosas son impermanentes, por lo cual, cuando la mente se adhiere a su objeto y desea (ya sea con avidez o aversión) se condena a sufrir --puesto que el objeto no podrá ser poseído permanentemente y aquello que hoy produce placer mañana producirá dolor. De cualquier manera, esto aparece en el esquema de la originación dependiente de los 12 nidanas o eslabones que originan y mantienen el samsara: siendo el primero la ignorancia, la cual da pie a los sankharas (tendencias; Herbert Guenther traduce "constructores de realidad"), que generan la conciencia, que genera el cuerpo, y así sucesivamente, en un circuito relativamente cerrado... El profesor Elías Capriles explica la causa del sufrimiento desde la perspectiva del mahayana en su libro Budismo y dzogchen: 

Hay una casua del trishna ["deseo" en pali; tanha]) o sed de existencia (impulso a confirmarnos como un yo sustancial y ansia para colmar una carencia esencial) que el hinayana considera como la causa del dukha [sufrimiento]. Esta causa tanto del trishna como del dukha que de él dimana, es la avidya o marigpa ["ignorancia", en tibetano]: un error o delusión que nos hace tomar lo relativo como absoluto, lo dependiente como independiente, lo insustancial como sustancial, lo condicionado como incondicionado, lo insatisfactorio como susceptible de proporcionar satisfacción, y así sucesivamente.

Así podemos ver claramente que es la mente, en su modo deludido que es el modo default del samsara, lo que origina el sufrimiento. Es por supuesto la mente en su modo correcto o depurado el origen también del nirvana o del estado libre de sufrimiento. Nirvana es sabiduría, samsara es ignorancia --esto no sólo es el fundamento del budismo, sino de casi cualquier camino espiritual (véase, por ejemplo, "La verdad os hará libres" del Evangelio, o el "Conócete a ti mismo" del óráculo de Delfos). La sabiduría, que el budismo mahayana notará que es en realidad el modo prístino de la mente no oscurecida por la transmigración en el samsara, tiene su base justamente en notar y hacerse responsable de que lo que nos sucede tiene su causa en la mente, en nuestros pensamientos y actitudes. Como dice uno de los entrenamientos de la mente del maestro budista Atisha: "Lleva toda la culpa a uno", ese uno que tiene toda la culpa es la propia mente, específicamente la mente ignorante. El esquema, por otro lado, es perfectamente científico en tanto que establece una causalidad que no tiene como base lo material sino que extiende esta noción con primacía a la mente: lo que pensamos y vivimos en nuestro interior no existe en un vacío inerte, no está separado de lo que experimentamos, es una continuidad dinámica e interdependiente. En un sentido fundamental, aunque remoto y hermético en la confusión de miles de vidas vagando en el samsara, los objetos que nos rodean y los eventos que nos suceden son solamente maduraciones de nuestro karma. No alcanzamos a ver la liga de nuestra mente y el mundo, la falsa separación de lo interno y lo externo.

Habiendo registrado en su base la preeminencia de la mente, el budismo desarrolla una serie de técnicas para purificar y llevar a la mente a su estado de funcionamiento óptimo, el cual es igual al despertar o a la realización (la percepción perfecta de las cosas como son). Estas técnicas son diversas y van desde técnicas meditativas como el cultivo de la concentración y la paz mental (el shamata), la visión penetrante (vipashyana) o cosas como meditaciones de compasión (tong-len en la tradición tibetana) y amor bondadoso (metta o maitri), las cuales ayudan a desvanecer la rigidez neurótica del ego. Asimismo se cultivan ciertas virtudes, como los seis o 10 paramitas (perfecciones de la mente-cuerpo) o los cuatro catalizadores que llevan a la mente al despertar, también conocidos como los cuatro inconmensurables.

Si no quieres ver, no le enciendas la luz

Que importante es comprender y aceptar que cada uno tiene su tiempo, que cada quien va a su propio ritmo. No todos van a tu paso y mucho menos van por tu mismo camino.
Cada persona tiene su propio momento de despertar y eso se debe de respetar. Es importante no interrumpir en el proceso de cada persona, porque cada evento es clave para su propio despertar espiritual.
Tú no eres responsable de salvar a la gente.Tú no eres responsable de convencerlos de que quieren ser salvados. No te sientas mal, solo acompaña.
Así que si no quiere ver, no le enciendas la luz, lastimarás sus ojos. Si no te quiere escuchar, no levantes la voz, dañarás su conciencia.
Si no quiere caminar, no insistas más, no proporciones apoyo, que sus pasos pueden ser dolorosos. Su despertar no es tuyo, es exclusivamente suyo.
Si en algún momento hiciste de su dolor tu dolor, suelta, eso no te pertenece y deja de lastimarte.
Sé amorosamente egoísta, silenciosamente paciente, amigablemente distante. No te pierdas en ello. Re-encuéntrate y alégrate, porque tú sigues siendo tú.

Toda emoción mal canalizada causa una enfermedad

¿Cuánta amargura, se necesita para que se convierta en diabetes? ¿Cuánta soledad, rencor o insatisfacción se requiere para manifestar un cáncer?
¿Cuánta ira, se precisa para que se convierta en gastritis? ¿Cuántas emociones no digeridas necesitas, para que se convierta en problemas estomacales? ¿Cuántas palabras no dichas y guardadas te has callado, para que se transformen en problemas en tu garganta o tiroides?
¿Cuántas insatisfacciones, son necesarias para que se originen las infecciones? ¿Cuánta falta de amor, se requiere para que se genere una dermatitis? ¿Y cuál será la dosis de abandono, para la obesidad? ¿Cuánto dolor y emoción seguirás guardando para que tú cuerpo lo manifieste en fibromialgia?
Toda emoción o sentimiento mal canalizado causa una enfermedad y despierta un patrón repetitivo emocional ancestral dormido. ¿Cuánto tiempo más quieres esperar para resolver eso que es importante resolver en tu vida?
¿En dónde está tu límite para decir “ya basta”, y tomar acciones reales, concretas, para cambiar esa historia que te lleva al hartazgo de tu vida?, porque sabes que esas situaciones no cambiarán solas, pero si te vas dando cuenta que con el tiempo si van empeorando.
Atrévete a realizar el cambio que requieres, que te permita cambiar esa percepción que hasta ahora tienes y puedas fluir como el agua viva, y recuperar la chispa de vida que está dentro de ti.

Ves aquello en lo que crees

“Nada de lo que veo significa nada. “ UCDM
Es el inicio del sorprendente UCDM.
Cuando decimos “ ves aquello en lo que crees”, estamos diciendo, ves solo tus creencias, cámbialas y verás otras cosas distintas.
Recuerdo la escena de la película Lucy, donde ella explica a los científicos que lo que da realidad a todo es el tiempo.
Sin el tiempo que da secuencia a todo, todo se realizaría instantáneamente.

Pone de ejemplo la película un coche que gradualmente aumenta de velocidad dando vueltas en círculo, cada vez más rápido hasta que deja de verse. ¿el coche ha desaparecido?
No, sigue estando allí, solo que no cumple las condiciones del Sistema al cual pertenecemos, la velocidad, ya que ella es muy grande.

No vemos el coche.
Pero existe. ¿Dónde?
En nuestro plano, no en otra dimensión.
El que no se vea no quiere decir que no exista.

"Nada de lo que veo significa nada." UCDM

miércoles, 15 de enero de 2020

No podemos cambiar la actitud de los demás, pero podemos elegir no participar en su juego

odos somos capaces de generar cambios en la actitud de quienes interactúan con nosotros, sin embargo, no de la manera que la mayoría desearía. No importa qué argumentos tengamos, ni qué tan válidas sean nuestras peticiones, los cambios no se dan en ninguna persona por presión, por obligación, ni siquiera por sentido común.
Podemos inspirar la vida de los demás, podemos sugerir rutas a tomar, podemos comportarnos como un ejemplo a seguir desde nuestro punto de vista. Pero solo cuando el otro se propone y actúa en pro de generar cambios, es que los pueden manifestarse.

No siempre el aceptar nos hace bien

Ahora bien, lo mejor sería aceptar a todos como son sin esperar que cambien, sin incomodarnos con sus actitudes, siendo empáticos y comprensivos con cada proceso personal. Pero la realidad nos grita en la cara que muchas veces ese nivel de comprensión no lo podemos adoptar y sencillamente la actitud de alguien de alguna manera nos lastima y no podemos soportarla.
Ya quedó claro que no podemos imponer un cambio en los demás, tampoco debemos condicionar a nadie, porque esto puede ser que se asome con buenos resultados, pero la realidad es que normalmente ellos van a corresponder a fachadas que por lo general no serán sostenibles en el tiempo, dando paso a lo que se es en realidad.
Ojo, todos podemos cambiar, todos podemos ser mejores personas, pero lo importante acá son dos cosas:
  • No podemos imponer cambios en el otro.
  • No tenemos que soportar algo que afecte nuestra integridad.
Luego, tenemos dos opciones:
  • Nos quedamos cerca de lo que nos está de alguna manera llevando a menos y procuramos que sus actitudes, aquellas que preferiríamos se modificaran, nos afecten lo menos posible.
  • No alejamos del foco del malestar y nos permitimos nuevas experiencias.

Quedarnos vs. alejarnos

El mantenernos cerca de lo que nos está lastimando puede ser visto como una muestra de afecto por la otra persona, pero probablemente represente un sacrificio del amor propio. Y tengamos claro que mientras no nos amemos y no nos cuidemos a nosotros mismos, no seremos motor de cambio para nadie, ni inspiración, ni mucho más…
Debemos aprender a establecer límites que nos protejan, sí, probablemente nuestro estado ideal por ejemplo es al lado de alguien y si no fuese por determinada actitud de esa persona, nuestra vida sería “perfecta”, pero tenemos que evaluar hasta qué punto eso que quisiéramos fuese distinto nos genera malestar y a partir de allí tomar decisiones.
Muchas veces al alejarnos de alguien generamos los cambios que estuvimos esperando. Ocurre que el hecho de perder a alguien, se convierte en un detonante de un proceso de cambio genuino, donde la persona reconoce sus oportunidades de mejora e inicia un trayecto de transformación.
Es conveniente que si optamos por alejarnos, no lo hagamos con la intención o con la esperanza de que esto puede ser lo necesario para obtener lo que deseamos. Si ocurre y nosotros estamos dispuestos y disponibles para gozar de los beneficios de ese cambio, ¡perfecto! Pero si nos vamos a alejar que sea porque usamos nuestra balanza y los mayores beneficios se ubican del lado de la distancia, así conservaremos el control de la situación y no estaremos bajo los efectos desagradables que generan las expectativas.

Si sabe que te lastima y lo sigue haciendo… ¿Crees que es una buena idea seguir allí?

Cada quien vive su realidad, pero cuando hablamos de actitudes del otro que te lastiman, que te has tomado la tarea de explicárselo, por si no está claro y esa persona persiste en ello, te está dando un mensaje muy claro y es tu deber tomarlo como tal. Si te sientes mal por lo que ha hecho y continúa haciendo, no desperdicies más tu tiempo, ni tus energías… Suelta y fluye, ya encontrarás a alguien que se adapte a lo que te hace bien y si no, sin duda, siempre es mejor la soledad a una dolorosa compañía.
Por: Sara Espejo 

Los cinco venenos blancos

Es tan fácil curar las alergias......
Y sin embargo hay millones de personas que las padecen.
Según datos oficiales 1 de cada 3 personas padece de algún tipo de desorden alérgico.
O sea que hay más de 2.5 mil millones de alérgicos en el mundo.
Alérgicos al polen, alérgicos a las plumas, alérgicos al pescado, alérgicos a la soja.
La lista es enorme.
Los alergistas han estudiado el problema, lo han diagnosticado con éxito pero no consiguen una cura, porque no se comprende la causa profunda y sólo se tratan los síntomas lo que reporta enormes beneficios a la industria farmacéutica.
La alergia es el resultado de una respuesta inadecuada del sistema inmune que reacciona frente a un estímulo que no constituye una amenaza para la salud.
El pescado no es una amenaza para la salud, pero si un alérgico al pescado lo come puede tener una reacción muy severa que incluso puede requerir hospitalización.
Entonces la cura “consiste” en evitar el pescado y tomar anti alérgicos cuando aparecen los síntomas.
Y el individuo se convence de que es alérgico al pescado y lo proclama a los cuatro vientos y finalmente se convierte en creyente de su propia cronicidad.
Nosotros los estudiantes del orden del universo consideramos que la alergia es un desorden de tipo yin extremo que produce una profunda debilidad en el sistema inmune.
Y la causa está en esa creencia errónea, en esa autoimagen de “enfermo” y en una dieta antifisiológica.
Los cinco venenos blancos....lácteos, harinas blancas, arroz blanco, sal refinada y azúcar.
Y en particular los lácteos que vuelven hipersensible al sistema inmune que reacciona frente a las proteínas de la leche de vaca.
Cuando se evitan estrictamente los cinco venenos blancos la alergia se cura sola y sin gastar dinero.
Pero la mayoría de los alérgicos prefieren seguir padeciéndola antes que renunciar a sus cinco adicciones blancas.
.Martín Macedo-

La fe del niño es pura y no tiene límites.

Cuando un niño escribe sus peticiones a Papá Noel y cree que será atendido y complacido, está trabajando con el Poder Infinito.
Cuando un adulto formula sus pedidos a Papá Noel, no está seguro sobre si Papá Noel podrá financiar sus regalos.
Dependerá del precio y del dinero que le quede en su billetera mágica.
Trabaja con el mismo poder que el niño.
Pero el niño trabaja con un poder infinito sin restricciones.
Y el adulto debido a su mente lógica le pone un cerco.
Y cuanto más sabe, más se estrecha ese cerco.
Y se siente orgulloso de ser adulto y de haber aprendido a aceptar la "realidad".
La fe del niño es pura y no tiene límites.
Pero los adultos tienen fe en la "ciencia".
Y la ciencia sólo estudia lo que se puede ver, oler, tocar y pesar.
La ciencia sólo estudia la sombra, porque no puede ver la luz infinita.
La palabra infinito le atemoriza; no es algo que se pueda encerrar en un cofre o guardar en el banco.
Entonces el infinito queda fuera de la cuestión.
La medicina oriental es la medicina de la energía.
La energía es chi infinito e ilimitado.
La ciencia occidental sólo ve y trabaja sobre el cuerpo visible.
Y allí termina su esfera de acción.
Opera el cuerpo o le vierte fármacos a sus fluidos biológicos.
Y no puede hacer más.
Porque su mente se ha estrechado y rechaza el mundo sutil.
No lo puede comprobar científicamente.
Y la gente que cree en la ciencia termina aceptando los tratamientos antibióticos y quimioterapia tan debilitantes.
Esa es la razón por la cual la medicina moderna todavía no encuentra la cura para la mayoría de las enfermedades.
"Estamos investigando, la ciencia todavía no halló una cura".
Y así podemos estar 1000 años más.
Porque mientras se desprecie el componente no visible de la ecuación, lo que queda para "investigar" es la parte menor, la sombra, el cono visible del iceberg.
-Martín Macedo-

La verdad, la llave que nos presentó Ohsawa


Ohsawa nos trajo una llave para abrir la puerta hacia la libertad infinita.
Se trata de la llave más preciosa.
Una llave que abre la puerta de nuestra prisión, y así poder escapar.
¿Cómo no estar agradecidos, eternamente a nuestro libertador?
Pero hay muchos vendedores de llaves....que aseguran que su llave es la mejor.
¿Cuál es esta llave?
Es muy simple.
Esta llave es la verdad.
Y la verdad os liberará (Juan 8-31).
Nuestra llave, la llave que nos trajo Ohsawa es la verdad.
La verdad sobre la nutrición.
La verdadera nutrición que nos libera de la prisión, del encierro, del dolor.
No se trata de creerle o no creerle.
Los resultados hablan más fuerte que ningún orador.
La nutrición de alta calidad cura y produce la salud infinita.
La nutrición de baja calidad enferma y destruye la felicidad.
Esa es la gran verdad.
Y si estudiamos esa verdad, podremos escapar de cualquier tipo de problema, crisis, limitación o sufrimiento.
Esta llave también se denomina el Orden del Universo.
Pero muchos desprecian esa llave.
No quieren saber de nada que tenga que ver con ella.
Prefieren sus falsas llaves que no sirven, que no curan, y que muchas veces acaban matando más rápido que la misma enfermedad.
Pero la venta de esas llaves genera muchas ganancias.
Son llaves tentadoras porque liberan de la responsabilidad al enfermo.
Y la mayoría no quiere responsabilizarse por su situación.
Ellos van al médico y claman: ¡quíteme esto, sáqueme este dolor, cúreme lo antes posible!
Ellos quieren ese tipo de llave.
Si le ofrecemos la llave de la salud infinita muchas veces la rechazarán porque no tienen paciencia para aprender a usarla.
Sólo quieren su aspirina para sentir alivio.
Y si le piden eso a la vida.
La vida eso les dará.

-Martín Macedo-

Es mejor invertir nuestro tiempo en hacernos grandes, fuertes y sabios.


Tarde o temprano lo pequeño será grande.
Y lo grande volverá a ser pequeño.
Es la Ley Eterna.
El círculo de la vida y la muerte.
Para vivir primero hay que morir.
Hay que morir a nuestra mediocridad, a nuestras adicciones, a nuestra timidez, a nuestra arrogancia, a nuestra falta de atención y a nuestras creencias limitantes y auto denigrantes.
El yo enfermo debe morir para que nazca el yo sano.
Pero mucha gente hace la "dieta" para curarse y cuando se siente mejor la abandona.
No desea volverse saludable.
Sólo aliviar los síntomas y el dolor.
Porque cuando se siente mejor "amplía" su nutrición.
Es decir que el viejo yo, enfermo y decadente sigue intacto.
Sólo que en vez de aspirinas tomó sopa de miso por algunos meses.
"¿Si me siento bien para qué voy a ser estricto?"
Así razona la mayor parte de la gente.
Espera a que venga una grave enfermedad para ser "estricto".
La disciplina es esencial para que lo pequeño se haga grande.
No hay gran futbolista, ni gran científico, ni gran músico sin pasión y disciplina.
Cuando un futbolista famoso o un gran músico pierden su disciplina y se entrega a los excesos cae estrepitosamente.
La disciplina es la escalera a la grandeza.
Ella te lleva hasta la cima y te permite quedarte allí tanto tiempo como lo desees.
Pero la mayor parte de la gente cuando llega a la cima comienza a darse unos "gustitos" y al poco tiempo se desploma.
Es el círculo de la vida y de la muerte.
Por ello no debemos atacar a los poderosos.
La misma rueda se ocupará de ellos y pronto caerán.
Como el imperio romano que cayó por sus excesos.
Es mejor invertir nuestro tiempo en hacernos grandes, fuertes y sabios.
Porque no hemos venido a evitar que alguien sea grande.
Para eso están los mediocres.
Que como han olvidado su misión.
Se dedican a obstaculizar el ascenso de los grandes.
Porque no soportan ver cómo se convierten en estrellas.