El polo negativo de la bombilla corresponde a nuestros deseos reactivos.
El polo positivo corresponde a toda la satisfacción y energía de Integridad que deseamos en la vida.
El filamento corresponde a nuestro libre albedrío para elegir NO reaccionar y evitar así el placer directo.
Del mismo modo que la resistencia del filamento mantiene la luz encendida, nuestra resistencia (RESTRICCIÓN) al comporta-miento reactivo mantiene brillando a la Integridad espiritual. Cuando no conseguimos aplicar Restricción a nuestros impulsos reactivos y reaccionamos creamos un cortocircuito.
Se establece una conexión directa entre nuestros deseos reactivos (el polo negativo) y la Integridad del placer (el polo positivo). Se produce un destello momentáneo de deleite auto gratificante y después sobrevienen los Quiebres que nos restan en nuestro Aquí y Ahora, porque la – bombilla-, el alma, ha generado un cortocircuito y se ha quemado a sí misma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario