miércoles, 11 de septiembre de 2019

Soy como el Ave Fénix

Soy como el Ave Fénix...Renazco una y otra vez de mis cenizas..cada vez con más fuerzas..
Soy como el Ave Fénix...me he visto hacerme cenizas y renacer una y otra vez...
Para renacer, es preciso hacerse cenizas, morir...para volver con más fuerzas es preciso llegar al final y volver a comenzar.
Cuántas veces sentimos que hemos muerto al concluir una etapa, al ver terminado un vínculo, al ver que nuestras fuerzas fueron disminuyendo, es que cuando llegamos a la cima de la montaña... ya no se puede ascender más...sólo queda el descenso, la bajada....
Por eso quienes estén hoy en el pie de la montaña...den gracias, porque sólo queda subir, ascender....llegar a la cima....
Todo es un proceso cíclico...un eterno repetir, un sin fin de veces sentimos que nuestras fuerzas han llegado a su fin, es ahí cuando es preciso descansar...pero detenerse jamás...
Ahí comienza el principio....nuevamente luego de prepararse en el mas absoluto silencio, como lo es el silencio de la cima de una montaña...cerca del cielo y las nubes, los vientos llevarán lejos las penas, los rencores, los dolores, para escuchar el sabio silencio del cielo...es ahí dónde más se escucha nuestro interior...
Cuando estamos hechos cenizas, pronto, muy pronto, aparecerá la nueva persona que daremos paso a que nazca, y que los viejos rencores hayan concluido, los perdones hayan sido dados, las deudas saldadas, las penas olvidadas y que la vida nos espere a que abramos nuestras alas...
y nuevamente echemos a volar....
Renacer... es preciso verse morir, ver nuestras cenizas, para volver a empezar...
Lo que la oruga interpreta
como el fin del mundo
es lo que su dueño denomina...mariposa.

Cuando creamos que es el "fin"...en verdad es el comienzo, la oportunidad de convertirnos, rehacernos en un ser más bello aún, con más fuerza, con más fortaleza, con mayor esplendor.
No todo es visto desde la perspectiva del que sufre...estamos en la vida, pero somos instrumento de nuestro creador...que sabe bien cuál es nuestra misión en la tierra...
Somos nosotros los que debemos encontrar esa misión y nuestro don para realizarla...
Si aún estamos en la tierra...nuestra misión aún no ha sido cumplida...sigamos luchando y orientemos nuestra búsqueda interna a nuestro don, a nuestra misión...para llevarla a cabo estamos.

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