El trigo y la cizaña crecen juntos.
Si intentamos erradicar la cizaña también erradicamos el trigo porque son inseparables, son las dos caras de la misma moneda.
Algunos promueven la vacunacion contra la gripe y otros advierten contra sus peligrosos efectos.
Algunos insisten sobre la necesidad de consumir proteínas animales y otros desalientan su consumo por sus efectos nocivos.
Los especialistas oncológos insisten sobre la necesidad absoluta de aplicar quimioterapia en el tratamiento de los tumores malignos mientras que los médicos naturistas y terapeutas alternativos desalientan enérgicamente su uso.
No se trata de mayor o menor inteligencia.
O de mayor o menor cantidad de evidencias.
Se trata de frecuencias vibratorias.
Todo es vibración como enseña el kybalion.
Y las personas funcionan y deciden en base a su frecuencia vibratoria dominante.
Los alimentos son frecuencias vibratorias y las creencias también.
Las personas que se nutren diariamente con alimentos de origen animal especialmente carne o derivados de mamíferos (extremo yang) van a vibrar en una frecuencia también muy yang.
Y frente a una amenaza a la vida procederán de acuerdo a su frecuencia y no dudarán ni por un segundo en que hay que atacar con todos los medios disponibles al terrible enemigo.
Si el enemigo es el virus de la gripe sentirán que la "verdad" está en vacunar a la población para proteger a la gente con la mejor arma con la que cuenta la ciencia.
Y se entregarán con pasión y voluntad de hierro a recomendar la vacunacion sintiendo que están siendo héroes que están salvando a su nación o al menos minimizando el efecto destructivo del virus.
Si se trata de un tumor maligno, dada su agresividad, responderán con mayor agresividad aun, sea con cirugía quitando la víscera que lo contiene y los tejidos circundantes por la posible diseminación, sea con quimioterapia para reforzar las acciones orientadas a la aniquilación de todo rastro del tumor o de sus células.
Pero cuando la vibración es yin, suave y pacífica, el especialista sentirá aversión a remover órganos o tejidos porque siente que son sagrados y que sólo están momentáneamente alterados por un estado tóxico.
La solución yang creada por una nutrición yang será la violencia y el ataque contra la amenaza.
La solución yin creada por una nutrición centrada en alimento vegetal, será la comprensión serena de las causas profundas y la modificación de la conducta que ha creado este estado temporal.
La vibración yang experimenta miedo por el presente y por el futuro de la enfermedad.
La vibración yin agradece la experiencia considerándola como una oportunidad para el crecimiento espiritual y entrevé un futuro maravilloso si se aplica en una dirección constructiva.
Y también esto se aplica a los pacientes.
Los de vibración yang preferirán la "ciencia" y sus evidencias.
Los de vibración yin preferirán la terapias "alternativas".
Y luego de experimentar todos los contrastes, el alma madura y comienza a comprender el grandioso Orden del Universo.
-Martín Macedo-
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