El ego

Al ego le encanta distraerse.
Y la sociedad le provee de todo lo que necesita para que se distraiga.
A la sociedad.al mundo no le interesa que el ser humano despierte.
Solo necesita de un robot que haga que el mundo funcione correctamente.
Y que no se de cuenta de que es utilizado para tal función.
Por lo tanto se gastan fortunas en películas que duermen mas a la gente!
Nuestros dioses hoy son cantantes de rock regueatton, actores de cine, etc.
Y algunos llevan el número 10 en la espalda!
Esas personas ganan fortunas incalculables para distraer a la gente. Para que sigan durmiendo cada ves mas.
Un medico en algún caso trabaja gratis para salvar lo mas valioso que tenemos, la vida.
Vivimos en un mundo muy loco!
Cine, television por cable, por internet, por celulares, todo al servicio de la distracción.
En casa, en el bus, en la oficina.
Todos conectados a la matrix alimentándola.
Donde esta la conciencia mientras tanto?
Durmiendo!
En el plano místico, espiritual pasa lo mismo.
La nueva era trajo miles de cursos, técnicas, formulas para todos los gustos y expectativas!
Algunos muy valiosos.otros no tanto.
El ego corre detrás de nuevas técnicas y cursos. Es como una droga, cada ves quiere mas y mas!
Muchas de estas personas terminan alteradas por tantas técnicas que incorporan.
Tengo una amiga que termino de esa manera.
Pero la distracción es lo que busca el ego.
Por que se aburre mortalmente!
Mucha gente no puede estar sola consigo mismas por que no lo soporta.
Entonces sale a la búsqueda de distracción.
Música con volumen alto, luces de colores, alcohol y a veces drogas por no saber vivir consigo mismo!
Detrás de todo esto siempre esta el mismo principio.
El ego y la conciencia. El sueño y el despertar!
O nos estamos distrayendo o estamos aprendiendo.
O nos estamos durmiendo mas o estamos despertando.
Todo lo que quiere y desea el ego, la conciencia no lo necesita!
El mundo no necesita de la conciencia.
Si necesita al ego.
Para la conciencia este mundo es un medio, no un fin.
Para el ego este mundo es su fin.
Acumulad vuestro tesoro en el cielo (la conciencia) y no en la tierra (el ego) decía el cristo.