La relación que mantienes con el dinero es una manifestación del vínculo que tienes contigo mismo. El dinero al igual que las personas es energía, es vibración. La manera en la que tú vibres y te relaciones contigo misma, será manifestada en tu relación con el dinero.
Muchas veces escuchamos decir “no me alcanza el dinero”, “no puedo compararme la ropa que deseo”, “no puedo darme el lujo de ir a un masajista”, “no cuento con el dinero suficiente para ir a comer a un restaurante, ir al gimnasio”, “hay cosas más importantes en donde debo gastar el dinero” “no merezco algo tan caro, eso es para ricos"...
Presta atención a cada una de estas manifestaciones anteriores y ahora pregúntate lo siguiente: ¿A caso tú no eres lo suficientemente valiosa para pagar por aquello que deseas? ¿Hasta cuándo te vas a dejar en el último lugar? ¿A caso esperas que la gente te observe como una persona carente? ¿Esperas que las personas abaraten los costos porque te observan en escasez? Revisa los pensamientos que tienes acerca de ti, y las creencias que tienes respecto al dinero ¿Qué piensas de ti? ¿Te sientes merecedor/a de aquello que deseas tener? Recuerda que cada pensamiento que tienes de ti mismo es una vibración y como toda vibración, atrae aquello que manifiesta.
Cuando tengas algún pensamiento de carencia económica, presta atención, cambia ese pensamiento por otro de abundancia y vive tú día a día en esa vibración. Date mimos, regalos, invierte en ti mismo y comenzarás a tener más autovaloración, vibrarás más alto, las personas te observarán con otros ojos y el dinero será abundante. Siente tu abundancia y cultiva tu autovaloración.
Recuerda que cuando pagas algo tienes que pagar con gratitud, porque estas contribuyendo al bienestar de otras personas, y al recibir dinero debes agradecerlo y sentirte merecedor .
Analia Rotta
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