La imagen corporal está relacionada con los otros.
Con el miedo al que dirán los otros, me aceptarán ? Seré aceptado?.
Si sólo estuviésemos nosotros en el planeta no existiría imagen corporal.
En todo grupo hace falta un símbolo de pertenencia ,el uniforme militar el escolar el deportivo, la bandera del país, etc y la imagen corporal cumple simbólicamente ese papel
Nuestra imagen está ligada íntimamente con ese símbolo de pertenencia aceptado por todos.
Vinculamos la aceptación o no de los otros con nuestra autoestima, si la autoestima es alta la valoración de la imagen es baja y al revés.
Hay quien desea modificar su mundo interior modificando el exterior, una casa nueva, muebles nuevos, un nuevo look.
Y en la obesidad ocurre igual, quiero modificar mi dimensión interior con las normas sociales, no con mis deseos sino con los de otros.
Es el miedo a la separación.
El obeso ve que una vez que el mundo le ha ofrecido “cosas vía amor para ser feliz, para llenarse de amor vía alimentos”, ahora para volver a la imagen perfecta, a la perfección para adaptarnos a este modelo de belleza nos ofrece un cúmulo de ofertas vía negocios:
... gimnasios, dietas, productos supuestamente milagrosos, cirugías de todo tipo ya que la imagen corporal ya no es sinónimo de salud , sino de pertenencia o exclusión de un grupo social dirigido por la moda, los medios de comunicación, es decir, por el ego.
El ego nos separa de la Fuente para ser felices y luego que somos obesos , nos dice que para ser felices debemos de volver a la Fuente, algo nos engaña o nos dejamos engañar.
El cuerpo ha dejado de ser sagrado como reflejo de su Creador, “ ... a su imagen y semejanza”.
Destruyamos nuestra imagen y destruiremos Su imagen en nosotros.
Es la rebelión del ego contra su Creador, contra la creencia en la separación.
No somos obesos, somos Hijos de Dios.
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