Este se refiere a no quitarle la vida a seres sintientes, como seres humanos y animales. Se excluye, por ejemplo, a las plantas y los microorganismos que, aunque se consideran formas de vida para la ciencia, y están vivos, el budismo no los considera sintientes ó conscientes por lo cual alimentarse de vegetales y utilizar medicamentos contra agentes patógenos no implica la ruptura de esta norma. También es en general admitido que es legítimo matar en defensa propia ó de los demás, Naturalmente estos son casos extremos. La participación de los budistas en las guerras y su ejercicio como militares está sujeto a debate con argumentos a favor y en contra, y ha sido un tema muy complejo en los países budistas (todos los cuales tienen ejércitos) cuando estos han tenido que lidiar con conflictos bélicos y autodefensa. Si bien el budismo rechaza la violencia y aboga en todo momento porque sea la última opción, se han dado diversos casos de participación de budistas en guerras incluyendo la revuelta de monjes Shao Lín en China contra los mongoles (que ayudó en su expulsión del país), el fuerte vínculo entre los guerreros samurai de Japón y el budismo, e incluso, según estudios de eruditos budistas zen, el apoyo realizado por algunas escuelas de budismo zen a los esfuerzos militares de Japón durante la guerra, aunque este es un caso aislado. No obstante muchos budistas han sido objetores de conciencia y en otros casos han sido reconocidos como líderes mundiales en favor de la paz. Varios budistas han sido galardonados con el Premio Nobel de la Paz, como el Dalai Lama y la activista birmana Aung San Suu Kyi. Si bien existe debate al respecto, se considera que el budismo admite la validez de matar por defensa propia (lo que incluiría campañas militares de autodefensa) pero siempre como último recurso, como generalmente abogan diferentes artes marciales, muchas de ellas de filosofía budista.
En lo personal abogo por la Paz absoluta....
No hay comentarios:
Publicar un comentario