miércoles, 4 de septiembre de 2019

Asume y suelta

Libera a tu victima, que no es más que el producto de un circulo vicioso de traer a tu presente tu pasado, de revivir como tu hoy aquello que te lastimó o confrontó.
Según en la vibración en que te encuentres, atraes las situaciones o personas que son un espejo de tu realidad, si te quejas, atraes momentos que incrementan tu queja, si te infantilizas, atraes personas con niños interiores no crecidos que te llevarán a madurar, todo lo que te incomoda y criticas de otros, no es más que el reflejo de aquello que requieres atender y resolver en tu interior.
El mejor maestro, no es aquel que te llena de halagos, de mimos, de bienestar, es aquel que toca tus heridas, tus dolores, tus debilidades, te disgusta, te indispone y te muestra a través de las emociones que genera en tí, aquello que no has querido ver y que te corresponde solucionar.
Aquél que te incomoda y que te causa mayor distancia, es con quien mas te pareces, pues él, refleja tu parte mas oscura, o aquello que deseas ser y por temor no has decidido asumir.
En la medida que las burbujas de los pensamientos de tu pasado se disipen, en la medida que atiendas en objetividad las emociones que se susciten con aquel marido, esposa, jefe, novia, amante, amigo, hijo, pareja, vecino, familiar, que te agrede, te lastima, te confronta, te degrada, te violenta, te critica, te juzga, te miente, te vulnera, te irrespeta, el circulo repetitivo se disolverá, avanzaras y te permitirás estar y vivir tu presente, tu realidad y te obsequiarás el regalo de vivir en bienestar tu vida.
Sana, soltando y dejando en el pasado el momento vivido y quedándote con las lecciones y aprendizajes que has elegido, pues todos elegimos nacer, vivir y trascender.

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