Todos bebemos agua.
Todos estamos constituidos por 75% de agua.
Todos tenemos trillones de células altamente funcionales.
Células milagrosas, creadas por el amor infinito.
¿Por qué algunas personas tienen muchas células malignas?
Cuando son pocas el sistema inmune las descarta rápidamente.
Pero cuando son muchas se aglomeran formando tumores.
Y su tendencia es a multiplicarse descontroladamente.
Las personas que gozan de una gran salud tienen básicamente agua.
Las personas que están muy enfermas tienen básicamente agua.
La diferencia está en las sales minerales.
Cada ion de calcio o sodio o potasio tiene su propio campo magnético.
Cuando se pierde la proporción de minerales se pierde el equilibrio electromagnético.
Se alteran las cargas eléctricas y se genera un caos.
Un cortocircuito.
El agua es la misma para todos.
Pero la concentración de sales minerales varía mucho de una persona a otra.
La proporción de la salud perfecta está en el agua de mar.
Gracias a la sal marina que genera a través de sus iones.
El campo magnético de la salud del planeta.
Se parece a un programa informático.
El agua de mar tiene una información.
El agua de un refresco tiene una información.
El agua que está dentro de los alimentos tiene otra.
Por eso la única forma de restablecer el equilibrio magnético.
Es a través del alimento.
Ya que la mayor parte de los alimentos son básicamente agua.
Y la calidad del agua y sus sales determina la calidad emocional.
Por eso quien controla la calidad de su alimento.
Controla la calidad de sus emociones.
Tiene poder absoluto sobre su destino.
Y puede convertirse en un ser de una extrema grandeza.
-Martín Macedo-
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