Mi maestro, el Rav Berg, explicó que esta semana todo se trata de apreciación. La apreciación es la clave para disfrutar verdaderamente lo que tenemos en la vida, que es lo contrario a tener bendiciones que signifiquen muy poco para nosotros.
¿Cómo comenzamos a desarrollar tener más apreciación?
Sólo hacer un esfuerzo consciente es un comienzo, pero la Kabbalah enseña que hay un proceso de 4 fases por el que todos tenemos que pasar para realmente llegar ahí.
¿De dónde viene la apreciación? La respuesta es: teniendo un verdadero anhelo por la bendición que quiero apreciar y disfrutar.
Un buen ejemplo de este "deseo" podría ser cuando se trata de aire acondicionado frío y refrescante (tenemos una ola de calor esta semana en Londres, créanlo o no).
Si nos quedáramos todo el verano dentro de un maravilloso hogar con aire acondicionado, puede que nos salvemos del calor, ¿pero realmente estamos disfrutando al máximo el aire acondicionado? Ciertamente es agradable tenerlo, pero puede que no lo apreciemos porque olvidamos lo increíblemente caliente que está afuera.
Esto es lo que los kabbalistas llaman deseo pasivo. Sin embargo, alguien que pasó todo el día afuera en el calor abrasador y entra casi gateando a su casa con aire acondicionado para colapsar en el sofá, tiene un deseo verdadero.
Así que, ¿cuál es la limitación del deseo pasivo?
Para considerar una verdadera acción de compartir, el receptor debe apreciar verdaderamente y disfrutar lo que está recibiendo. Así que si la misión del Universo es compartir plenitud infinita con nosotros para que disfrutemos verdaderamente, nuestro deseo pasivo significa que estamos impidiendo que esto ocurra.
Las Cuatro Fases por las que pasamos nosotros como vasija son las siguientes:
Fase Uno - Deseo pasivo (Me despierto en mi hogar con aire acondicionado como si fuera normal estar en un ambiente frío).
Fase Dos - Despertar inicial de la apreciación (Darse cuenta de que es un día muy caluroso y estar bastante feliz de no estar allá afuera.).
Fase Tres - Crear una carencia (salir al calor hasta que se vuelva terriblemente incómodo.).
Fase Cuatro - Verdadero deseo y apreciación (Regresar a la casa y pensar: "¡Vaya! ¡Esto se siente increíble, estoy disfrutando verdaderamente esta sensación!).
¿Cuál es la fase que es particularmente importante para manifestar un verdadero deseo? ¡Correcto, la Fase Tres!
Recuerda que, sin importar qué ocurra, el universo está tratando constantemente de darnos todo, pero necesita que tengamos un verdadero deseo y apreciación. Por ello tenemos dos opciones de cómo por la Fase Tres. Si usamos el mismo ejemplo del aire acondicionado, la primera manera y más proactiva de crear esa carencia sería salir a dar una caminata. La segunda manera, que es reactiva e incluye sentimientos de sufrimiento sería que se dañara la unidad del aire acondicionado y que nuestra casa se calentara como un horno. Ambas formas me llevan a tener un deseo verdadero, pero una es proactiva y no incluye sufrir porque estuve en control todo el tiempo.
Esta semana nos dará la energía y la fuerza para ver nuestras bendiciones y apreciar lo que tenemos, sin enfocarnos en lo que no tenemos o en lo que creemos que queremos. De esta forma, no tenemos que perder las bendiciones en nuestra vida para llegar a un lugar donde podamos desearlas verdaderamente. Podemos usar esta semana para ver donde quizás hayamos caído en un estado pasivo de deseo en nuestra vida, nuestro trabajo, en una relación, etc. y encontrar una manera proactiva de despertar la carencia y despertar un deseo verdadero.
Esto puede hacerse compartiendo (o haciendo más esfuerzo en esa área) para que puedas comenzar a apreciar las bendiciones antes de que se vayan.
Hay una canción que fue escrita en los años 80, "No sabes lo que tienes (hasta que lo pierdes)". Quizás después de aprender un poco de Kabbalah y de las Cuatro Fases, ¡ellos podrían haber considerado un título alternativo!
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