jueves, 21 de junio de 2018

Más allá de la mentalidad de la masa

El tercer cuerpo es mayor que el segundo, más sutil que el segundo, más elevado que el segundo.
Los animales son muy vitales. Mira caminar a un león. Qué belleza, qué gracia, qué grandeza. El hombre siempre se ha sentido celoso. Mira correr a un venado. Qué ligereza, qué energía, ¡que grandioso fenómeno de la energía! El hombre siempre se ha sentido celoso. Pero la energía del hombre se está moviendo más hacia arriba.
El tercer cuerpo es manumaya kosha, el cuerpo mental. Es más grande, más espacioso que el segundo. Y si no lo desarrollas, te quedarás sólo como una posibilidad de hombre, pero no serás un hombre verdadero. Pero, en mayor o menor medida, tú no lo tienes. Lo que tienes en su lugar es un mecanismo condicionado. Vives por imitación: entonces no tienes mente.
Cuando empiezas a vivir por tu cuenta, espontáneamente, cuando empiezas a responder por ti mismo a los problemas de tu vida, cuando te haces responsable, empiezas a crecer en el manumaya kosha. Entonces el cuerpo-mente crece.
Vuélvete más vivo, auténtico, responsable. Aún si existe la posibilidad de desviarte, desvíate, porque no hay modo de crecer si tienes tanto miedo de cometer errores. Los errores son buenos. Se tiene que cometer errores. Nunca cometas el mismo error otra vez, pero nunca tengas miedo de cometer errores. Las personas que tienen tanto miedo de cometer errores nunca crecen. Siguen sentadas en su lugar, con miedo a moverse. No están vivas.
La mente crece cuando enfrentas, encuentras, situaciones por ti mismo. Generas tu propia energía para resolverlas. No sigas pidiendo siempre consejo. Toma las riendas de tu vida en tus propias manos; a eso es a lo que me refiero cuando digo que hagas tus propias cosas. Estarás en problemas; es más seguro seguir a los demás. Es conveniente seguir a la sociedad, seguir la rutina, la tradición, las escrituras. Es muy fácil, todos las están siguiendo; sólo tienes que convertirte en una parte muerta de la manada, sólo tienes que moverte con la multitud a donde quiera que vaya. No es tu responsabilidad.
Pero tu cuerpo mental, tu manumaya kosha, sufrirá tremendamente, terriblemente; no crecerá. No tendrás mente propia, y te perderás algo muy, muy hermoso y algo que funciona como un puente hacia un crecimiento más elevado.
Así que siempre recuerda, cualquier cosa que te diga, la puedes tomar de dos maneras. Puedes simplemente aceptarlo por mi autoridad: �Osho así lo dice; debe ser verdad�. Entonces sufrirás, entonces no crecerás. Cualquier cosa que yo diga, escúchala, trata de entenderla, impleméntala en tu vida, ve cómo funciona, y luego saca tus propias conclusiones. Puede que sean las mismas, puede que no. Nunca pueden ser exactamente las mismas porque tú tienes una personalidad diferente, un ser único. Cualquier cosa que estoy diciendo es sólo mía. Está enraizada en mí, de una manera profunda. Puedes llegar a conclusiones parecidas, pero no pueden ser exactamente las mismas. Así que no debes hacer tuyas mis conclusiones.
Deberías tratar de entenderme, deberías tratar de aprender, pero no deberías acumular mi conocimiento, no deberías acumular mis conclusiones. Entonces tu cuerpo-mente crecerá.
Una vez que has ido más allá del cuerpo mental, por primera vez te haces consciente de que no eres la mente, sino el testigo. Por debajo de la mente permaneces identificado con ella. Una vez que sabes que los pensamientos, las imágenes mentales y las ideas son sólo objetos, nubes flotando en tu consciencia, te separas de ellos... inmediatamente.
Vas más allá del cuerpo... te vuelves uno que ya no está más confinado a ningún cuerpo, uno que sabe que no es el cuerpo, burdo o sutil, uno que sabe que es infinito, sin barreras. Mahavideha significa uno que ha llegado a sentir que no tiene barreras. Todas las barreras son confinamientos, prisiones; y él puede romperlas, tirarlas y puede volverse uno con el cielo infinito�.
Osho

No hay comentarios:

Publicar un comentario