Desde la antigüedad la palabra tuvo su poder. Si alguien daba su palabra eso era más o igual que una ley, nada la modificaba.
Hoy, por supuesto las cosas cambiaron, la palabra en ese significado "dejó de tener poder” para la gente.
Pero tu palabra continua siendo poderosa para ti. Sí, todo lo que dices produce una gran actividad mental en tu ser. Recuerda que la mente no diferencia si lo que dices es verdad o mentira, si es una novela o una realidad. Si la pronuncias, por mas instantánea que parezca, fue producida por un pensamiento, y este es energía que está fluyendo en tu mente, y está atrayendo pensamientos similares desde tu subconsciente, y emitiendo esa frecuencia y atrayendo pensamientos similares de otras personas. Por lo tanto, tu "manera” de hablar, está condicionando tu día, tus relaciones, tu vida cotidiana.
Entonces, piensa como será tu día si desde que te despiertas estás pronunciando palabras que te generen lo que deseas "hoy estoy bien”, "me siento lleno de energías”, "buen día”, "me siento estupendamente”, "que hermoso día hace”, "me encanta tener este trabajo”, "estoy seguro de que podemos encontrar una salida positiva”, "con un poco de imaginación, seguro encontramos una nueva forma de ver este problema.”, "gracias”.
Usa este poder, tu palabra. Habla tu vida y la verás hacerse tu realidad.
Fuente 📚 pensamientospositivosahora
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