La fuerza de la mente, aumenta aquello en lo que se enfoca con pasión.

Soy perfecto y a la vez imperfecto.
Soy inmortal pero mi cuerpo es temporal.
Soy tan feliz pero a veces soy infeliz.
Soy un joven apasionado pero también soy un hombre maduro.
Soy la encarnación de la salud absoluta pero ya no corro tan rápido.
Soy inmensamente rico pero tengo algunas carencias.
Soy muy yang en algunos aspectos.
Soy muy yin en otros.
¿Dónde poner mi atención?
¿Por qué voy a enfocarme en el lado infeliz, carente y vulnerable?
La atención; la fuerza de la mente, aumenta aquello en lo que se enfoca con pasión.
Voy a amplificar el lado feliz, exitoso y saludable de mi existencia dual.
Y voy a hacer que crezcan y que se expandan hasta ocupar un espacio inmenso.
Grande como una galaxia.
Sólo con la fuerza del pensamiento sostenido.
Todos tenemos ese poder.
Pero la mayoría permite que otros distraigan su atención.
Y así pierden su poder.
Pero a partir de hoy todo será diferente.
Porque dirigiremos la atención hacia donde lo hacen los sabios.

-Martín Macedo-