Lo inexistente es lo que no hemos deseado suficientemente.
Esta genialidad es una frase del escritor griego Nikos Kazantsakis.
Todos tenemos algo que deseamos ardientemente alcanzar.
Y lo intentamos muchas veces y finalmente desistimos.
Concluimos que es imposible.
Y lo dejamos así.
Mientras vemos cómo otros más “dotados” alcanzan lo que nosotros no pudimos alcanzar.
Como nosotros no pudimos a veces surge el deseo de ver caer al que tuvo éxito.
Pero aunque caiga nuestra felicidad no será completa hasta que alcancemos nuestro objetivo.
Si lo intentamos mil veces y fallamos.
Hay que intentarlo mil veces más.
Y con mayor pasión y voluntad.
Es el único camino que todos debemos recorrer.
Es la única receta para lograr todos nuestros sueños.
El camino de los dioses.
No hay atajos.
Ni nada por inventar.
Si nuestro objetivo no disminuye la felicidad de nadie.
Avancemos confiados por el camino de las grandes almas.
Porque somos todos hijos de la misma divinidad.
Algunos más experimentados que otros.
Pero estamos hechos de la misma sustancia.
La energía primordial del universo.
Somos la inteligencia infinita.
Somos divinidad y no podemos dejar de serlo.
Entonces sigamos al maestro griego que antes de morir nos dejó su legado eterno.
Si lo quieres de verdad.
Si lo que quieres aumenta la vida de tus hermanos.
Sólo continúa con pasión infinita.
Con voluntad infinita.
Con persistencia infinita.
Y llegarás a la cima del mundo.
-Martín Macedo-
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