martes, 1 de agosto de 2017

Todo esta conectado con todo

Como es adentro es afuera.
Como es arriba es abajo.
Todo está conectado con todo.
Cuando escuchamos atentamente las dificultades que nos plantean en la consulta....
Estamos "viendo" el interior de esa persona.
Porque lo que dice revela lo que está adentro.
Entonces como es adentro es "afuera".
Su discurso revela su nivel de comprensión, su auto confianza, sus miedos y sus esperanzas.
Su voluntad de cambiar o su falta de voluntad de hacerlo.
Si es arrogante o si tiene una perspectiva espiritual de la vida.
Si adentro hay conflicto.
Las palabras serán negativas, incluso tóxicas.
Si adentro hay belleza.
Las palabras serán hermosas y reconfortantes.
Será un placer mantener una conversación con una persona así.
Muchas personas cambian su dieta y se vuelven muy estrictas con sus prácticas alimenticias.
Pero al hablar con ellas utilizan palabras duras, críticas, ven la maldad en todo y siempre tienden a buscar el defecto de todo con lo que se encuentran.
Se ha dicho: "antes de hablar hay que pensar".
"Piensa antes de hablar".
Porque todo lo que digas puede ser utilizado en tu contra.
Nosotros elegimos las palabras.
Nosotros elegimos los pensamientos que permanecen en nuestra "cabeza".
Elegimos los alimentos, y las técnicas de cocción.
La cantidad de veces que masticamos cada bocado.
La pareja que nos acompaña en la vida.
La profesión a la que nos dedicamos con nuestra mejor energía.
Los pensamientos son semillas.
Que pueden germinar o no.
Si se las cuida y atiende pueden convertirse en grandes árboles.
Nos convertimos en aquello que pensamos dijo Buda.
Si permitimos que los pensamientos negativos se queden mucho tiempo se harán fuertes y se expandirán contaminando el mundo.
El pensamiento sostenido crea la emoción.
La emoción sostenida crea la fuerza o la debilidad del cuerpo.
Y la debilidad del cuerpo invita a todas las enfermedades del libro.
Y todo queda revelado en el discurso.
En la canción feliz o desdichada que cantamos cada día.
Todos los días.
Como si fuera un himno sagrado.
Que va directamente a los oídos del Gran Poder.
Que escucha y atiende.
De inmediato.


-Martin Macedo-

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