La Bioneuroemoción® es un método humanista que se basa en diversas disciplinas para aunar una serie de conocimientos que, aplicados al ámbito cotidiano, permiten a las personas tomar conciencia de sus patrones inconscientes de comportamiento. Nos lleva a comprender que nuestras experiencias no son fruto de la casualidad y que podemos decidir cómo vivir nuestra vida.
1. La vida es sincronía.
La Bioneuroemoción® parte de una premisa central en su filosofía: nuestra experiencias están relacionadas con nuestro estado de conciencia. Esta concepción holística de la realidad, compartida por muchas culturas a lo largo de la historia, explica la manera en que nuestra forma de ser, nuestros pensamientos, sentimientos y emociones, influyen en el entorno en que vivimos y en nuestro cuerpo, propiciando que experimentemos una serie de situaciones que reflejan aspectos de nosotros mismos.
“Experimentamos en nuestra vida el reflejo de lo que somos.”
Actualmente existen dos disciplinas fundamentales que plantean la relación directa entre el sujeto y su entorno. Por un lado, la Física Cuántica demuestra que el observador afecta en lo observado con los experimentos de la dualidad onda/partícula de Young y las posteriores interpretaciones de Copenhague, Feynman o el principio de incertidumbre de Heisenberg.
La Bioneuroemoción® aplica también principios de la Epigenética Conductual, la ciencia que estudia los factores que, sin ser propiamente genéticos, juegan un papel determinante en la expresión de los genes. Desde este ámbito, se entiende que las modificaciones de nuestro organismo resultan de la adaptación a un ambiente, que en el caso de los seres humanos no es únicamente el entorno que percibimos objetivamente, sino también la interpretación que hacemos de él. A través de la Bioneuroemoción® se comprende que nuestra percepción de la realidad genera el ambiente emocional frente al que nuestro inconsciente activa las modificaciones epigenéticas.
La Bioneuroemoción® hace una recopilación de todos estos descubrimientos científicos para rescatar un conocimiento ancestral sobre el ser humano:
“Si no te gusta el mundo que ves que sepas que no lo puedes cambiar, pero si cambias tu forma de ver el mundo cambiará tu universo”. Albert Einstein
2. Inconsciente personal, familiar y colectivo.
Para entender la forma en la que interpretamos nuestro entorno, la Bioneuroemoción® se centra en el funcionamiento del inconsciente, que es el responsable de gestionar hasta el 98% de la información que percibimos a través de nuestros sentidos y que genera las respuestas de adaptación ante dichos estímulos.
La Bioneuroemoción® se fundamenta también en la teoría del holograma de la física cuántica. Uno de los principales exponentes de estos descubrimientos es el físico David Bohm, que utiliza los términos orden explicado y orden implicado para hablar de la relación entre la conciencia de una persona y su realidad. Partiendo de sus explicaciones, la Bioneuroemoción® tiene en cuenta que el orden implicado de una persona (su conciencia) se forma dentro de un inconsciente familiar/colectivo del que se nutre y al que aporta, que luego resulta en unas experiencias de vida determinadas. La Bioneuroemoción® entiende que analizando el orden explicado de una persona (su realidad personal), se puede acceder a su orden implicado para así generar los cambios su realidad individual.
El inconsciente, que funciona de forma autónoma y automática, es biológico, lo que significa que se ocupa de la supervivencia del individuo. Es por esta razón por la que, aprendizajes de nuestros padres o abuelos pueden heredarse a las futuras generaciones, ya que se establecen en el inconsciente familiar como una forma determinada de gestionar una interacción con el medio que garantiza la supervivencia del clan. De esta forma, las personas heredan una tendencia conductual a la hora de gestionar las circunstancias sus de vida.
Otro factor importante a la hora de estudiar la programación inconsciente de la persona es el proyecto sentido, que son las situaciones y sobre todo la forma de vivirlas de la madre durante el tiempo que trascurre entre el proyecto de concepción y hasta los 3 años de edad del niño. Desde un punto de vista biológico, es muy importante la relación que mantiene un niño con su madre durante estos primeros años de vida, ya que aquí es donde se estructura inicialmente su adaptación al entorno, que guarda relación directa con la forma de interaccionar de la madre con el medio.
3. Sólo existe el presente.
La Bioneuroemoción® tiene en cuenta la no-linealidad del tiempo como un factor importante a la hora de facilitar a las personas la resolución de sus conflictos. Las investigaciones de Bluma Zeigarnick demuestran experimentalmente la relación de la memoria con las taras inconclusas, es decir, recordamos especialmente aquellas situaciones que nuestro inconsciente considera que están todavía pendientes de solucionar. Esto conlleva una prolongación del estrés que continúa sin resolverse hasta que la persona revive la misma situación, esta vez con una percepción diferente.
Por otro lado, el físico Nassim Haramein sugiere que no existe el espacio-tiempo, sino el espacio-memoria. En sus obras explica que el tiempo es un concepto que no existe si no hay memoria, y que la memoria es lo que crea el concepto del tiempo, pues el hecho de recordar el momento anterior crea la ilusión de que existe un pasado y un futuro.
Las emociones son los elementos que nos permiten relacionar unas experiencias con otras, estableciendo relaciones por resonancia entre ellas; de esta forma quedan ancladas en nuestro recuerdo. Nuestro inconsciente, que es atemporal, reacciona de una forma similar frente a entornos que identifica como semejantes. Como resultado, quedamos condicionados por experiencias previas para reaccionar de una manera determinada frente a las visicitudes diarias. La Bioneuroemoción® propone un viaje a través de nuestra conciencia para reinterpretar situaciones pasadas mediante un cambio emocional.
Este mismo planteamiento puede corroborarse desde la física cuántica, aplicando el principio del entrelazamiento cuántico, según el que podemos modificar situaciones que sucedieron en un teórico pasado, simplemente modificando la información que portamos en la actualidad. La Bioneuroemoción®, teniendo en cuenta todo lo anterior, considera que la resolución a cualquier problema se encuentra en el presente y que cada día de nuestras vidas es una nueva oportunidad para reinterpretar nuestro pasado, y por lo tanto, crear un nuevo futuro.
En síntesis, la Bioneuroemoción®, desde la comprensión de estos patrones heredados de conducta e interacción con el entorno, propone la toma de conciencia como primera fase para el cambio de percepción. La programación transgeneracional tiene una intención positiva que, después de hacerse consciente, puede reemplazarse por otra distinta libre de condicionamientos inconscientes.
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