Cuando alguien te desea el mal, no se da cuenta de que se lo desea a si mismo, porque lo que de ti sale a ti regresa. Cuando alguien te dice que no podrás salir adelante, solo será testigo de tu vuelo alto. Porque no hay fe más grande que la que tengas por ti mismo, más valor que el de la fuerza de tu espíritu y sostén más poderoso que el que te otorga Dios. No cargues procesos ajenos, evita engancharte. Cuando alguien te desee mal deseale suerte y mandale bendiciones porque estará tan enfocado en tu vida que olvidará vivir la suya.
Las personas acusan a los demás sin percatarse, sin darse cuenta que es su propia psiques la que se esta exponiendo..
Nadie puede herir a nadie, es uno mismo quien escarba en sus propias llagas..
El afuera solo nos muestra donde esta el conflicto, donde esta nuestra herida emocional… herida que debemos sanar para vivir una vida plena….
Aceptación, perdón, amor y gratitud, simples palabras que contienen la información necesaria para que tu puedas sanarte, liberarte de todo sufrimiento…
La opinión personal, es una pérdida de energía que nos lleva a juzgar al otro y peor aún a criticar al otro.
Ya aprendimos que todo lo que nos molesta del otro es sólo una proyección de lo no resuelto en nosotros.
El sabio es aquel que tolera todo, ya aceptó que no dirá ni una palabra en su defensa porque las opiniones de los demás no lo afectan y tampoco necesita convencer al otro para ser feliz.
El silencio interno nos hace impasibles, el ayuno de palabras educará nuestro ego y nuestra personalidad que tiene la mala costumbre de hablar todo el tiempo.
No intentemos forzar, manipular, ni controlar al otro, debemos dejar que los demás sean lo que son o mejor dicho, sean según su capacidad de ser.
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