Dar y recibir

 ¿Qué cantidad de comida debemos comer?

¿Qué cantidad de aire debemos respirar?

¿Qué cantidad de agua conviene beber?

Porque hay un límite; como cuando hacemos un pan.....hay un límite para cada ingrediente que si se pasa estropea la masa.

Yo digo...se puede comer en abundancia, se puede respirar en abundancia y beber en abundancia.

Hasta los más pobres del mundo pueden respirar en abundancia, beber en abundancia y comer en abundancia.

Los animales salvajes también tienen abundancia de agua y comida.

Lo que diferencia a los salvajes y civilizados es el grado de facilidad o dificultad con que acceden a la abundancia.

Pero ella está siempre allí, aunque no la vemos.

Vemos la carencia como vemos el vaso medio vacío.

Pero si elegimos ver la abundancia, podremos gozarla.

Porque si juntamos un vaso medio lleno con otro y otro tendremos finalmente una gran cantidad de agua...sólo que el proceso será más lento.

Ohsawa decía: "podéis comer todo el arroz o cereales que deseéis pero masticando muy muy pero muy bien".

Yo creo que podemos tomar aire y comida en abundancia pero sin crear un estado tóxico.

Podemos inhalar aire fresco de la montaña en cantidad pero si hiperventilamos nos vamos a marear o incluso a desmayar por exceso de oxígeno.

Tomamos aire y luego lo devolvemos.

Dar y recibir.

Si damos mucho podremos recibir mucho.

Pero hay gente que quiere recibir..... recibir y no quiere dar.

Quiere recibir ayuda, afecto, regalos, atenciones, mimos, dinero, cursos gratis, sorteos de casas y viajes.

No entienden la ley y se convierten en acumuladores y luego explotan.

Podemos tomar todo el mundo pero si damos lo mejor de nosotros.

Quien toma y no da acumula y luego explota.

Quien toma mucho y luego da mucho puede seguir tomando mucho, tomar toneladas, millones, billones de dólares y seguirá haciéndolo con gran alegría durante toda su vida.

Así lo hace la madre naturaleza.

Ella da todo y luego recibe nuestra orina, nuestros desechos, la basura que producimos....

Ella da mucho, y por eso recibe mucho y no se enferma.

Aunque ahora estamos llegando a un punto crítico porque la pobre se está aburriendo de comer tanto plástico.

-Martín Macedo-