Un diploma no garantiza nada.
Un post grado no garantiza nada.
La gente busca títulos y doctorados intentando asegurar un futuro exitoso.
Pero es una ilusión.
Los más grandes físicos nucleares de la ex unión soviética tenían ingresos tan bajos que solicitaron empleos en la Facultad de Ciencias de mi país donde ganaban igual que un empleado postal.
Los diplomas son símbolos externos, son útiles pero no son garantía de nada.
No garantizan ni la salud, ni la felicidad, ni el éxito financiero.
La única garantía de éxito infinito es volverse íntimo con la inteligencia infinita.
Y acceder a la voluntad infinita.
Y a la creatividad infinita.
Y eso sólo es posible si despertamos del gran sueño, de la ilusión de la separación.
La gran enfermedad es el olvido.
Y la salud infinita es el retorno a la maravilla que siempre fuimos.
-Martín Macedo-
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