Es momento de que veamos los "problemas" como
lo que son en realidad: ¡Nuestros más grandes regalos!, los abrazaremos con el respeto que se merecen.
Cada obstáculo, cada problema, con el que tropezamos, cada reto que experimentamos en nuestras vidas no son otra cosa más que una oportunidad, ¡la mayor oportunidad, de hecho!, para revelar Luz en nuestras vidas.
Estamos destinados a utilizar los "problemas" como desafíos y
saber que si nos metemos en él, generando una tercera alternativa de mayor valor, podemos superar cualquier cosa.
La grandeza no se mide por lo que alcanzamos. Se mide por como transformamos cada "problema" en un desafío. Los problemas no existen, al menos desde la interpretación vulgar del término. Un problema es un determinado asunto o una cuestión que requiere de una solución.
En todo caso es un desafío.
La grandeza no se mide por lo que alcanzamos. Se mide por como transformamos cada "problema" en un desafío. Los problemas no existen, al menos desde la interpretación vulgar del término. Un problema es un determinado asunto o una cuestión que requiere de una solución.
En todo caso es un desafío.
Cuando no se resuelve, se esquiva o se elude, pocas veces se conciben como una oportunidad, un desafío para crear valor y agradecer que los hayamos generado, lo del principio un "problema", "nuestro mayor regalo", aprovéchalo para transformar tu vida cada vez.
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