miércoles, 25 de diciembre de 2024

Almas Viejas

  Las almas viejas son aquellas que, según algunas creencias, han reencarnado muchas veces, acumulando sabiduría y experiencias a lo largo del tiempo. Se dice que están transitando sus últimas reencarnaciones, lo que las convierte en almas diferentes, profundas y, a menudo, desconectadas de los intereses cotidianos.

Si alguna vez sentiste que no encajas del todo o que tu perspectiva de la vida es distinta a la de los demás, estas 10 claves podrían ayudarte a descubrir si eres una alma vieja:
1. Actitud tranquila y desapegada
Las almas viejas suelen vivir con un aire de cansancio frente al mundo. Prefieren un estilo de vida relajado, alejándose del materialismo y las superficialidades. Su honestidad puede ser cruda, pero siempre es genuina.
2. Naturaleza solitaria
Siguen su propio camino, independiente de lo que otros consideren "normal". Aunque pueden ser cordiales y buenos compañeros, prefieren mantener sus emociones y pensamientos más profundos para sí mismos.
3. Relaciones sentimentales complicadas
Solo conectan profundamente con otras almas viejas o con personas con las que sienten un vínculo especial, tal vez de vidas pasadas. Su desapego emocional puede ser difícil de comprender para los demás.
4. Individualismo extremo
No buscan liderar ni seguir; simplemente actúan según sus principios. Prefieren mantenerse al margen de estructuras jerárquicas y vivir con una ética personal que respete la libertad de todos.
5. Desapego material
Desde pequeños, muestran poco interés por las cosas materiales. No buscan acumular bienes ni logros superficiales, sino experiencias que nutran su crecimiento personal.
6. Una conexión con su lado oscuro
Las almas viejas suelen lidiar con sentimientos de melancolía o aburrimiento frente a la vida cotidiana. Muchas veces sienten que la realidad es un juego artificial en el que no quieren participar.
7. Magnetismo especial
Tienen una energía que atrae a las personas, quienes encuentran en ellas un refugio seguro para hablar de temas profundos. Sin embargo, si algo no les interesa, pueden mostrarse distantes e intransigentes.
8. Desconexión con lo trivial
Parecen despistadas o desinteresadas, pero en realidad están enfocadas en lo que consideran importante. No invierten energía en cambiar lo que no disfrutan, simplemente lo evitan.
9. Ética inquebrantable
Son naturalmente honestas, íntegras y tolerantes. Desde pequeños tienen un fuerte sentido de la justicia y rara vez sienten envidia, celos o apego.
10. Sabiduría y sensibilidad
Aunque su apariencia puede parecer despreocupada, sus ojos suelen transmitir una profundidad que cautiva. Ven a través de las superficialidades y buscan conexiones genuinas con quienes los rodean.
Artículo de: Marcia Morales Montesinos

Teoría Sintergica

"No existe una realidad independiente o ajena a nosotros, somos nosotros quienes la elaboramos." Jacobo Grinberg

Todo lo que percibimos en nuestra realidad física existe como información en la estructura del espacio. Por lo cual, no tiene una existencia como materia, sino como conciencia.
En la estructura del espacio, se encuentra la información de los objetos pero no la cualidad de los mismos. Es decir, no existe la luz, ni el sonido tal como lo conocemos. No hay colores ni formas ni imágenes ni texturas ni objetos externos. Esos detalles se encuentran algorítmicamente concentrados en cada punto de la estructura del espacio. A ésta estructura se la denominada "Lattice".
La lattice es la estructura organizada del espacio, es una especie de enrejado o celosía. Este enrejado, red o matriz energética, contiene toda la información del universo en cada uno de sus puntos.
El cerebro, a través de la actividad neuronal, decodifica la información contenida en un punto de la lattice. Esa información decodificada da como resultado la realidad física.
En un punto de la lattice se encuentra la totalidad de la información del universo y nosotros decodificamos, en forma parcial, esa información.

Cada punto de la lattice, contiene en su estructura, mayor información que la que el cerebro logra decodificar. La capacidad de decodificación dependerá del funcionamiento neuronal y éste funcionamiento, a su vez, está determinado y determina el nivel de conciencia en el cual funcionamos.
Por lo tanto, es el nivel de conciencia de cada quien, el que determina la realidad que percibe.
Únicamente cuando nos convertimos en la lattice misma, estamos en posibilidades de percibir la realidad tal como existe. Para lo cual, debemos localizarnos en la conciencia de unidad (borrar nuestros filtros, historia personal y condicionamientos).

- Jacobo Grinberg -

domingo, 22 de diciembre de 2024

Amor, Practica Cotidiana y actitud en el "aquí y ahora"

  •  Las prácticas de Vida Sencilla, Libertad, aquí y ahora y Silencio aportan una Paz y una Armonía interior que, poco a poco, van generando la inclinación a la Quietud y a un dejar de hacer ("no-hacer") tareas y actividades que antes llenaban nuestra agenda cotidiana.
  • La paulatina profundización en el "no hacer" pone de manifiesto que hay una premisa previa: percatarse de la "innecesaridad de hacer", de que no hay "deber de" ni "tener que" hacer nada. 
  • La "innecesaridad de hacer" se halla íntimamente unida a la percepción de que todo tiene su porqué y su para qué y que todo fluye refluye y confluye en la perfección de cuanto Es. Y eso, a su vez, hace "ver" que todo está en Evolución y que la idea de "cambio" es una fisión del ego. De este modo, el ego va perdiendo fuelle y protagonismo en nuestra vida. 
  • Así, se va produciendo la desidentificación con el cuerpo físico, los sentidos corpóreos-mentales y la vida material (es muy importante el papel de la meditación en este proceso de desidentificación). Y, en paralelo, la toma de conciencia sobre nuestra divinidad -"verdadero ser" y "naturaleza esencial"- que conlleva, entre otras cosas, la apertura de otros sentidos y "ventanas" conscienciales para percibir lo Real.
  • En la medida en que todo lo anterior echa raíces en nuestro interior, se constata que la idea de "perfección" era una experiencia de la dualidad en la que vivíamos cuando nos identificábamos con un yo físico-material: no es que todo sea "perfecto", sino que, sencillamente, todo "Es". 
  • Este "Es" se corresponde con esa aceptación del verbo "ser" . Por tanto, el todo "Es" supone que todo, simplemente, "Acontece": una experiencia continua, compuesta de experiencias que no son duales -ni positivas ni negativas-, sino todas igualmente precisas y maravillosas, que se despliega y es expresión de la Vida. Esto permite constatar el auténtico calado del aquí y ahora: el momento presente no puede ser pensado, pues ya sería pasado. El momento presente es experiencia pura y no puede ser intelectualizado, ni etiquetada, ni enjuiciado. Si se hace esto, ya no se trata del momento presente, sino de un momento pasado.
  • El acontecer y la experiencia pura son desenvolvimiento  (Movimiento) y Manifestación de lo Inmanifestado.  Enunciado coloquialmente, lo Manifestado es la "dimensión superficial" de Dios y lo Inmanifestado, "su dimensión subyacente". 
  • Lo Inmanifestado es la Naturaleza Esencial de Dios, por más que Dios sea todo y todos, lo Inmanifestado y su Manifestación. Y los "atributos" de Inmanifestado (dimensión subyacente) se trasladan como "referentes" y "pautas de atracción (absorción)" al proceso evolutivo y a la vida cotidiana (dimensión superficial).
  • El ejercicio efectivo de estos "atributos" libera el Amor que somos todas las capas que, en nuestra evolución consciencial, taponaban su Presencia y distorsionaban su Frecuencia. Y esta, la Frecuencia del Amor, se transforman en la base y la totalidad de las actitudes con las que, en cada momento presente, afrontamos los hechos y circunstancias del día al día, tanto los que la mente juzga de importantes como los que considera menores o insignificantes.
  • Interiorizando todo lo precedente, la Vida se transforma en un "vivir viviendo" en el que, desde el Amor y sin iniciativa propia, se va acometiendo aquello que la Providencia y la propia Vida (no la mente ni el ego) van poniendo por delante. Y no se hace porque sea necesario por o para algo, o porque haya una obligación de hacerlo, sino porque la Vida nos va situando ante ello y como plasmación y acción de nuestros dones y talentos.
- Emilio Carrillo (del libro DIOS)-

lunes, 11 de noviembre de 2024

La mente tiene un poder infinito

 Los expertos afirman que la mente tiene un poder infinito.

Todo ser pensante tiene mucho poder.
Infinito poder.
¿Cómo entonces algunos dicen.....no puedo?
Han olvidado quiénes son.
Su mente se confunde y cree que están por fuera del infinito.
Pero no puede existir nada fuera del infinito porque el infinito lo abarca todo.
En su ilusión la mente individual renuncia a su poder y suplica por un poco de pan y vestidos para su frágil existencia.
Llama a la mente universal "Padre" y le construye templos.
Y enseña a sus hijos y nietos a venerarlo.
Se parece a una pequeña hormiga que se aparta del hormiguero y desde la copa de un árbol contempla el hormiguero y piensa: " qué grande y poderoso es este hormiguero; qué maravillosa intensidad, día y noche....y qué frágil y pequeña soy".
Y así obsesionada con su pequeñez se siente pobre y desvalida porque su conciencia se ha fragmentado creyendo que puede existir fuera de su colectividad.
Y al sentirse carente atrae por semejanza experiencias de carencia.
Y se crea un círculo vicioso.
La enfermedad es un estado de carencia.
Disminuye profundamente la energía, la fuerza, la función, la potencia.
Y para restablecer la abundancia necesaria para alcanzar una magnífica salud no es suficiente con tener unos buenos hábitos de nutrición y ejercicio.
Es necesario integrar la conciencia individual en la conciencia de lo infinito, hasta sentir que somos infinitos, eternos, completos y poderosos.
La palabra macrobiótica no se refiere a semillas o alimentos.
Es básicamente una contemplación del grandioso orden del cual no podemos escapar ni por un segundo porque si lo hiciéramos dejaríamos de existir instantáneamente.
Asumir nuestra eternidad, nuestra grandeza y nuestro poder es la única forma de vencer todos los miedos y entrar por la puerta principal en el Reino de los Cielos.
Y la nutrición de la más elevada calidad prepara la mente y el cuerpo para esta entrada triunfal.

-Martin Macedo-

sábado, 9 de noviembre de 2024

No solo de pan vive el hombre

 “No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio del Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.

Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita, ¿y dónde están esos libros?
¡Libros!, ¡libros! He aquí una palabra mágica que equivale a decir: “amor, amor”, y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso, Fiódor Dostoyevski, padre de la Revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita, pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: “¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!”. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua, pedía libros, es decir horizontes, es decir escaleras para subir a la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.”
—FEDERICO GARCÍA LORCA—

El principio de las transformaciones

 El principio de las transformaciones opera en todos los niveles, visibles e invisibles.

Quienes desconocen este principio sienten que la vida está llena de absurdos e injusticias.
Sienten que realizar cualquier sueño es extremadamente difícil.
Pero con el principio de las transformaciones todo es mucho más fácil.
Este principio ha sido estudiado y aplicado con éxito por las culturas asiáticas.
Porque es el pulso del universo.
El universo pulsa con yin y yang.
Una dispersa y la otra condensa.
Una aumenta la velocidad y otra la disminuye.
No se necesita un laboratorio de física para aplicarla en los asuntos cotidianos.
Una aumenta el peso y la otra lo disminuye.
Una aumenta la agresividad de un virus y la otra la disminuye.
Una aumenta el tamaño de un tumor y la otra lo disminuye.
Entonces la llamada metástasis es un triunfo temporal de yin sobre yang.
Y la llamada "remisión espontánea" es un triunfo de yang sobre yin.
No se necesita ser médico para provocar una remisión espontánea.
Pero se necesita comprender cómo opera el principio de las transformaciones.
La multiplicación alocada y desordenada de las células constitutivas de los tumores malignos necesita un soporte de yin formidable.
Sobre todo hidratos de carbono livianos, de cadena corta.
Éstos abundan en la leche de vaca, el azúcar refinado, la harina blanca y algunas frutas de origen tropical.
Suprimiendo estos "combustibles" el comportamiento desordenado y desenfrenado de cualquier tumor se suprime de inmediato.
Pero los pacientes oncológicos luego de recibir las aplicaciones de radio y quimioterapia, además de las cirugías, vuelven a sus casas y siguen alimentando a sus cuerpos físicos con las cosas que han comido toda su vida, porque no está "demostrado científicamente".
Cuando la cocina no se basa en el principio de las transformaciones, se cae tarde o temprano en el extremo yin o yang.
Y los que comen esos platos acaban enfermando.
Y luego no entienden por qué si comen tan sano y no fuman ni beben han perdido su salud.
No es suficiente con ser vegano o naturista o comprar alimentos orgánicos.
Es necesario vivir este principio hasta en los mínimos detalles para crear una potente conexión con el universo viviente visible e invisible.
Porque cada partícula, cada onda y cada pensamiento pulsan según esta ley.
Y nos encanta enseñar esta ley.
Y lo haremos cada vez mejor porque la misma ley nos da la fuerza infinita para aplicarlo a todos los niveles.
Porque la mejor forma de aprender es ayudando a otros a aplicarlo exitosamente.

-Martin Macedo-

sábado, 2 de noviembre de 2024

No te lo tomes personal. Es vibracional.

Personas que ya no vibran como tu.

Lugares que ya no vibran como tu.
Sentires, modos de pensar y creer, rutinas, estructuras, que ya no son.
Las vibraciones no son ni buenas ni malas, son diferentes.

Cuando dejamos de vibrar con ciertas personas, lugares, creencias, y tanto más, nos cuestionamos si somos malas personas, recaen culpas y moral, nos cuestionamos el tiempo que la relación o la rutina viene durando y lo mal que nos sentimos por el alejamiento que se está produciendo.

Pero lo vibracional no es personal.

Nuestra energía ha estado cambiando, y por ende, nos está dirigiendo a lugares nuevos, vínculos nuevos, rutinas y creencias, y modos de vivir nuevos.

No es mejor nuestra energía que la del otro, simplemente es distinta, y busca energías afines.

No te lo tomes personal, es vibracional.

Si sientes que te causa esfuerzo, no es. Las vibraciones afines fluyen, las vibraciones discordantes causan esfuerzo y desgaste, y nos generan grandes fugas energéticas.
Las energías afines, nos energizan.
Descubre porque muchas personas desaparecen de tu vida como si se las hubiera tragado la tierra, descubre los Restrictores Energéticos y los Cordones Energéticos de Relación.